Agentes de la patrulla fronteriza de Estados Unidos detuvieron hoy a un grupo de cubanos que logró llegar a tierra estadounidense.

Sobre el incidente la cuenta en Twitter, Chief Patrol Agent Thomas G. Martin, que identifica al sector de Miami de la Patrulla Fronteriza de EE. UU, explicó que este lunes 29 de noviembre, muy temprano, agentes locales respondieron a un evento de contrabando marítimo en los Cayos de Florida.

En el hecho 18 migrantes cubanos fueron puestos bajo custodia federal luego de que tocaron tierra en una embarcación casera en Marathon.

Earlier today, #BorderPatrol agents along with local partners responded to a maritime smuggling event in the Florida Keys. 18 Cuban migrants were taken into federal custody after they made landfall on a homemade vessel in Marathon.   
 #cuba #florida #newsbreak pic.twitter.com/bPdEcvKiSD

— Chief Patrol Agent Thomas G. Martin (@USBPChiefMIP) November 29, 2021

Este fin de semana Estados Unidos devolvió a Cuba a un grupo de 16 balseros rescatados en al menos dos interdicciones en alta mar.

Tanto los cubanos interceptados en el mar, como los que logran tocar tierra y son descubiertos, tienen una posibilidad de ampararse en el miedo creíble para no ser devueltos a la isla.

Esta es una vía utilizada por miles de cubanos por décadas, amparada en la ley estadounidense que en teoría señala que “usted tiene derecho a pedirle a los Estados Unidos protección contra la persecución y la tortura en su país de origen”.

Realmente esto no solo lo puede hacer un cubano, sino cualquier extranjero, aunque la misma ley indica que usted tiene ese derecho, sin embargo, eso "no significa necesariamente que los Estados Unidos deban permitirle quedarse en el país, o que el gobierno no pueda deportarlo".

Una guía al respecto publicada por el Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, expone que: “en la práctica, significa que si usted ha expresado temor diciéndole a un oficial de inmigración que tiene miedo de ser deportado a su país de origen, debe tener la oportunidad de ver al oficial de asilo y contarle su historia”.

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