Una mujer de origen cubano, identificada como Greter Brito Acosta, fue arrestada en Hialeah, Florida, acusada de defraudar al Medicaid por casi 120 mil dólares.

Brito Acosta estaba contratada para cuidar a dos menores que recibían Medicaid, pero en lugar de proporcionar servicios como técnico de comportamiento registrado (RBT), facturaba servicios que nunca realizó.

La acusada falsificaba registros de servicios y facturaba por servicios no prestados para robar más de 100 mil dólares de los contribuyentes. La Unidad de Control de Fraudes contra Medicaid puso fin a este esquema y Brito Acosta tendrá que responder por sus delitos.

Según el comunicado de la procuradora general de Florida, Ashley Moody, la cubana sobornó a los padres de los menores con dinero para acompañar la documentación falsificada, los informes de progreso y más.

Además de facturar servicios que no realizó, la investigación también reveló que Brito Acosta pagó a alguien para que hiciera el examen que la certificó como técnico de comportamiento registrado de manera fraudulenta. La mujer está acusada de un cargo de fraude al Medicaid, lo que supone un delito grave de primer grado. El caso será procesado por la Oficina del Fiscal del Estado del condado de Miami-Dade.

El técnico de conducta registrado (RBT) es un asistente paraprofesional que brinda asistencia a domicilio con el fin de desarrollar habilidades y disminuir conductas problemáticas de los beneficiarios del servicio.

De acuerdo a registros públicos, Brito Acosta iba a los hogares de los niños, iniciaba sesión a través de una aplicación de teléfono celular para verificar la visita, apagaba la función de GPS del teléfono celular y se marchaba. Horas más tarde, volvía a la residencia, encendía la función de GPS del celular y cerraba la sesión.

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