En medio de la incertidumbre por el futuro del programa federal de parole humanitario para ciudadanos de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití, numerosas familias del sur de Florida se han reunido para pedir al juez que el programa permanezca activo.

La espera de respuesta para muchos patrocinadores se ha prolongado desde enero, generando preocupación sobre la posibilidad de que un juez federal de Texas decida suspender el programa, lo que dejaría a sus seres queridos sin la oportunidad de viajar a Estados Unidos.

El grupo de manifestantes se congregó frente al Restaurante Versailles, instando al juez Drew Tipton a no detener el programa de parole humanitario, expresando su desesperación ante la incertidumbre que enfrentan.

"Estoy esperando a mi hija desde el 26 de enero y no he tenido respuesta de USCIS. Le pedimos al juez que por favor, no pare este programa, porque estamos desesperados", señaló Fanny, una de las participantes en el acto frente al Versailles, a la cadena Telemundo.

La decisión del juez se espera en las próximas semanas después de que 20 estados, incluido Florida, interpusieran una demanda contra la administración Biden, alegando que el programa viola la ley.

El 27 de octubre marcó la fecha límite para que las partes involucradas presentaran sus argumentos. Desde entonces, la comunidad afectada aguarda con ansiedad el veredicto.

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