Cuba arde en virus pero el estado niega “enfermedad misteriosa”
Redacción de CubitaNOW ~ martes 23 de septiembre de 2025

En Matanzas la tensión crece y la desconfianza hacia las autoridades sanitarias se dispara. El Ministerio de Salud Pública negó la existencia de una “enfermedad misteriosa” y de muertes por virus desconocidos, pero reconoció lo que los vecinos ya saben de sobra: un repunte alarmante de arbovirosis como dengue, chikungunya y oropouche, que están golpeando con fuerza a casi todos los municipios de la provincia.
El brote más severo parece vinculado a un caso importado de chikungunya que, según los reportes oficiales, se ha propagado rápidamente, dejando a familias completas postradas en cama. Mientras tanto, el dengue continúa siendo la amenaza principal, con síntomas graves que requieren hospitalización en un sistema de salud que ya está colapsado.
Funcionarios aseguran contar con equipos de fumigación, camas disponibles y un equipo multidisciplinario para atender complicaciones. Sin embargo, la realidad en los barrios cuenta otra historia: mosquitos que se reproducen sin control entre la basura acumulada, hospitales sin insumos básicos y médicos que, aunque hacen lo posible, no pueden dar respuesta a la magnitud del problema.
La población no solo enfrenta la enfermedad, sino también la falta de información clara. Muchos se quejan de que el gobierno minimiza la gravedad para evitar reconocer una crisis epidemiológica de gran escala.
En redes sociales abundan los testimonios: madres desesperadas porque sus hijos tienen fiebre desde hace días y no encuentran medicamentos, ancianos que pasan horas en colas para conseguir un analgésico, y familias enteras que enferman al mismo tiempo, sin más opción que resistir en casa.
“Para decir mentiras hay que tener memoria y para decir verdad, valor”, comentó una usuaria indignada al escuchar las declaraciones oficiales. Otros aseguran que lo que llaman “arbovirosis” es simplemente la forma elegante de ocultar un escenario mucho más crítico.
La insalubridad, la falta de recursos médicos y el silencio oficial son el cóctel perfecto para que el miedo y la incertidumbre crezcan. Lo que se vive hoy en Matanzas no es solo un brote de enfermedades transmitidas por mosquitos: es una muestra más de cómo el pueblo cubano enfrenta sus batallas diarias prácticamente a solas, entre la desesperanza, la desinformación y la falta de respuesta real por parte de las autoridades.
Mientras tanto, las familias siguen preguntándose: ¿hasta cuándo?
Del perfil de Mario Pentón