Carlos Manuel Paifer Iglesias, creador de una parodia viral del controvertido festival San Remo Cuba, celebrado este año en La Habana, admitió que le gustaba hacer reír, pero apreciaba más cuando sus trabajos motivaban las reflexiones.

El artista plástico graduado en la Academia de San Alejandro logró que varios miles de cubanos compartieran su video en que el tenor italiano Andrea Bocelli se presenta al evento con una graciosa versión de "Con Te Partirò", donde menciona varios de los descalabros en la isla que por esas fechas abundaron en las redes sociales.

Entre ellos, la leche de cucaracha promovida por un artículo en la prensa oficialista, en medio de la grave crisis de alimentos del país, así como el lema de la empresa cubana de croquetas explosivas Prodal: 'Viva la salchicha, Viva el embutido'.

La voz de Bocelli la imita el propio Paifer. “Salchichidad semos hoy”, dice en una de las líneas de su versión. En una entrevista a la publicación independiente cubana Hyper Media Magazine, Paifer comentó que “está bien reírse de las desgracias (propias y ajenas) de una forma graciosa y creativa”.

“Lo creo útil e indicativo de desarrollo mental y hasta social. Pero si a través del humor se normalizan tanto los problemas que la casi unánime reacción ante ellos sea reír, en detrimento del acto de afrontar, pocas soluciones verán la luz”, explicó.

“En esa dirección suelo dirigir mis memes. Me gusta hacer reír, agradezco mucho la risa ajena; pero más me agrada y valoro mover la reflexión. Cuando logro las dos cosas, me doy un aplauso deportivo. A mí me gustaría hacer memes más justos, más necesarios. El humor es, ante todo, libertad. Así que, a medio camino entre la apnea y un buen aletazo, esto es, por ahora, lo que hay”, agregó.

Paifer también es creador de otros videos populares como la versión de “Bajanda”, del reguetonero Chocolate MC, interpretada por el trovador Silvio Rodríguez, o la de “Habla matador” de El Taiger, en la voz del cantautor Amaury Pérez.

“Mi lugar es el arte, eso sí es seguro, más que nada porque solo para eso sirvo, al parecer. He tenido la inmensa dicha de ganarme mi sustento siempre haciendo lo que me gusta y decidí ejercer: el arte. Ya sea editando, haciendo efectos visuales digitales, dirigiendo, colorizando videos, ilustrando, animando, diseñando, escribiendo, etc., voy viviendo y sobreviviendo… Pero nunca cantando. La música es mi refugio espiritual”, dijo.

“Soy un gran amante del humor. Si es negro y agrio, mejor. Adoro el minimalismo, la inmediatez y lo efímero; así que el meme me viene como anillo al dedo en tanto forma de expresión. Siempre he sido muy hiperactivo con las ideas y los chistes (los buenos y los malos especialmente)”, expuso más adelante.

Paifer dijo no creer que el humor fuera “en sí un mecanismo-reflejo de defensa ante las adversidades”. “Pienso, mejor, que es un estado superior de la empatía, por lo que, en primera instancia, jamás lo vería originalmente como un arma. Más que un rifle o una espada, veo en él una pala, un martillo, una aguja de coser. Algo destinado al trabajo productivo y creador, pero capaz, eso sí, de servir como arma, de ser preciso”, aseguró.

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