Jancelito es el nombre con el que se identifica en las redes sociales un joven activista cubano que ha dejado sus impresiones a raíz de trascender los cambios que ocurrirán en el centro comercial de La Habana Carlos III tras su reapertura. 

"Esta foto me duele, y me duele bastante porque son muchos los niños que no volverán a probar esas galleticas en largo rato, entre ellas mi hermana. Pero no es solo las galletas, Carlos III es el reflejo directo y más grande de lo que está sucediendo en todas las provincias, los principales "centros comerciales" para los cubanos que sí tienen la moneda del enemigo", dijo el chico, a través de su página oficial de Facebook.

"Hay quienes justifican y tratan de aliviar su cobarde conformismo con la frase "es necesario para abastecer el resto". MENTIRA, eso jamás ha sido y si fuera cierto es porque ellos mismos se han encargado de destruir la moneda, dejarla sin valor alguno y ahora somos los ciudadanos los que tenemos que pagar su ineficiencia y robo", añadió.

"Cuando veo esto, me parece estar escuchando a Serrano leyendo su panfleto, mientras habla que sobre la privatización en Bolivia, que ha dejado desamparados a millones de bolivianos, es lo mismo y hasta peor, pues nosotros no podemos y no tenemos cómo acceder a los dólares, sino es viviendo de la ayuda (y quien tenga) de los gusanos que no queríamos y no necesitábamos. #ElCambioEsYa #SumateAlCambio #Cuba #janceldh #DolarizacionEnCuba", finalizó este cubano.

Tras sus palabras, las reacciones llegaron: 

Adnaloy Briel: Es una falta de respetooooo total y eso que Carlos lll decía llamarse la casa de la familia cubana. De qué familia hablara ese cartel porque la gran mayoría de las familias nunca más podrán entrar. 

Yo Soy Libre: La solución está en las manos del pueblo. El fuerte es fuerte hasta que el débil quiere.

Yaser Ângëlblâck: Yo dije que nosotros el pueblo merecemos lo que nos está pasando por cobardes y lame botas porque cuando alguien alza la voz ninguno hacemos nada.

Yana L Guache C: Todos juntos a la calle. Todos los pueblos exigen y protestan por todo el mundo y obtienen mejoras. Excepto Cuba.

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