Un nuevo caso de violencia sacudió las calles de Santiago de Cuba durante la madrugada, cuando el joven motorista Osvaldo Sánchez Domínguez, conocido como “Osvaldito”, fue víctima de un asalto mientras ofrecía servicio de transporte en motocicleta. La información fue dada a conocer por el periodista independiente Yosmany Mayeta Labrada a través de su página de Facebook.

Según el reporte, el hecho ocurrió en las inmediaciones de la Rotonda de Carretera del Morro, un área muy transitada pero que en las noches se torna vulnerable ante la creciente ola de criminalidad. Osvaldito fue abordado por un pasajero que solicitó una carrera, pero todo indica que se trataba de una trampa.

Durante el recorrido, el joven fue atacado por el supuesto pasajero en complicidad con otro individuo. Ambos lo golpearon y le robaron la motocicleta Suzuki que utilizaba para trabajar. Aunque logró sobrevivir al asalto, el incidente dejó a Osvaldito con lesiones y, lo que es peor, en serios problemas, ya que él no era el dueño de la moto, sino solo el conductor.

Tras el robo, el joven víctima, junto con varios colegas, inició una búsqueda inmediata para tratar de recuperar el vehículo, al tiempo que notificó el crimen a las autoridades policiales de Santiago de Cuba. No obstante, hasta el momento, la moto no ha sido localizada.

La motocicleta robada tiene la chapa V 21807, y tanto el afectado como el periodista Yosmany Mayeta Labrada han pedido la colaboración ciudadana para aportar cualquier información que ayude a dar con su paradero. Se teme que el vehículo ya haya sido desarmado y vendido por piezas en el mercado negro, una práctica cada vez más común en la isla debido a la escasez y al auge del delito.

Este nuevo hecho de violencia no solo ha generado indignación, sino también preocupación, ya que refleja la creciente inseguridad que enfrentan muchos trabajadores por cuenta propia en Cuba, especialmente aquellos que ofrecen servicios de transporte informal, como es el caso de los motoristas.

Mientras la policía continúa con las pesquisas, muchos temen que este caso quede impune, como tantos otros. La falta de vigilancia, el deterioro del tejido social y la crisis económica han hecho que cada vez sean más frecuentes los asaltos a personas vulnerables, especialmente de noche y en zonas poco iluminadas.

El llamado a la ciudadanía es claro: quien tenga información sobre la motocicleta robada o los autores del asalto puede comunicarse de manera privada con la página del periodista o acudir directamente a las autoridades. La seguridad en Cuba, una vez más, queda en entredicho.

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