La defensora del régimen Ana Hurtado sigue con la polémica por llamar "gusano y oportunista" al cantautor cubano Pablo Milanés, quien se recupera en un hospital de Madrid, España.

Lejos de disculparse sinceramente, Hurtado se pone como víctima de una supuesta campaña en su contra. La influencer se ha llegado a comparar incluso con el fallecido dictador Fidel Castro.

"Veo que mi opinión importa más de lo que creía para no ser nadie como dicen algunos. No quiero ser influencer, rechazo ese término. Yo admiro a Antonio Gades, y aspiro a seguir siendo una simple miliciana de verde olivo", dijo Hurtado en Facebook.

"Mientras tanto, este es el campo de batalla, y aquí se lleva a cabo la defensa del socialismo y de Fidel. Con respeto, y sintiendo de corazón si mi opinión ha podido ofender los sentimientos y sensibilidades de algunas personitas", agregó.

La defensora de la dictadura de Cuba compartió algunos de los perfiles gestionados por la Seguridad del Estado que la están defendiendo en Facebook, como Tirador Cubano. "Gracias camarada. No vine a hacer amigos. Vine a defender una causa internacional; vine a defender el legado de Fidel que es el futuro de la humanidad".

"Pueden tildarme de antipática, de lo que quieran. Lo que tengo claro es que no me hago la graciosa y que soy transparente. Que me critiquen y condenen. A mí también la historia me absolverá. A todos los fidelistas".

"Firmeza en los principios. Porque no olvido de donde vengo, y sé lo que es el capitalismo. Lo veo a diario. Mi defensa a la revolución cubana, futuro de los pueblos del mundo, es férrea. Sintiendo mucho si a algunos han molestado mis palabras, no eran con ánimo de ofender sensibilidades. Yo soy fidelista. Ayer, hoy, mañana y cuando ya no esté también", reiteró.

Hurtado dijo este martes que "Pablo Milanés es gusano y bien. Oportunista que bebió las bondades de la revolución para luego traicionarla en el periodo especial. Menores presos no, delincuentes presos y bien presos que están. Se acabó el crear matrices falsas de opinión. Entiendo que duela, pero es lo que hay".

Las ofensas de Hurtado a Pablo milanés fueron criticadas incluso por la periodista oficialista como Elsie Carbó, de Juventud Rebelde. "Creo que ella debe saber que hay cosas con las que no se juega, aunque supongas que alguien te pueda aplaudir, difamar a un músico querido y admirado por los cubanos solo por placer malsano o jugar un juego incómodo sin saber siquiera dónde está el morro o la cabaña no causa gracia".

"Gusano o contrarrevolucionario ya suena obsoleto porque desde hace muchas décadas estos epítetos dejaron de sonar como injurias, en tanto los agraviados sustentarían una buena parte de la economía del país. Por lo tanto, resulta anacrónico y estúpido, tanto más cuando se trate de una figura como la de Pablo, quien nunca ha matado a nadie, ni ha liderado ningún partido político, ni ha violado ninguna mujer, bastaría sólo con preguntarle a esta jovencita dónde escuchó tales infamias, en qué cena, cónclave o cama, porque según todo indica, por su corta edad, nunca estuvo en un concierto de Milanés en el Carlos Marx, tampoco en ningún anfiteatro del país, ni en el barrio Los Sitios, ni en el parque Trillo, ni escuchó rumba cuando invitó a su amigo Harry Belafonte a una descarga en el solar de Campanario con Yoruba Andabo", recordó Carbó.

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