El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha anunciado su primer paquete de medidas para intentar reducir la violencia ocasionada por las armas de fuego.
Este jueves ante las cámaras, Biden advirtió que “la violencia con armas de fuego es en Estados Unidos es “una epidemia" y una "vergüenza a nivel internacional"…"Ya basta. Basta. Basta", exclamó el mandatario.
"Esto es una epidemia, por el amor de Dios, y tiene que parar", dijo el gobernante que según medios internacionales de prensa “ha recibido presiones por parte de su Partido Demócrata para que actúe tras los recientes tiroteos de Colorado, Georgia y California”.
En comparecencia ante la prensa desde el Rose Garden de la Casa Blanca, Biden propuso prohibir los rifles de asalto en Estados Unidos: "Nadie necesita un arma con un cargador de 100 balas", declaró.
El presidente, además explicó que “entre el tiroteo de Georgia y el de Colorado, que sucedieron ambos en menos de una semana, en EE UU hubo 850 tiroteos que dejaron 250 muertos y más de 500 heridos”.
De acuerdo con el diario El País, el gobernante “se dispone a ordenar al Departamento de Justicia que en 30 días presente un plan para ayudar a frenar el incremento en primer lugar, de armas que se fabrican en casa y son conocidas como ghost guns (armas fantasma).
Mientras, en un plazo de 60 días, el mandatario también va a ordenar al Departamento de Justicia a que regule además unos dispositivos (arm brace) con forma de arandela por donde se puede meter el brazo y que al acoplarse al arma les da más precisión, precisa ese rotativo.
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