Activistas de la sociedad civil cubana organizaron una cena destinada a personas de la comunidad trans y otros sectores sociales el pasado 23 de diciembre en Centro Habana.

El espacio autogestionado se realizó "con fondos provenientes de la solidaridad colectiva y exentos de financiamiento institucional cubano o extranjero. Los organizadores fueron muy transparentes en el manejo de las finanzas del espacio, publicando a diario la forma en que se emplearon los donativos", explicó la revista Tremenda Nota.

Mel Herrera, una de las organizadores, sufrió presiones de la Seguridad del Estado días antes de la cena.

No obstante, y pese a las amenazas, la cena se realizó y varios de sus participantes compartieron sus experiencias ese día.

"La cena comunitaria se hizo, después de muchos días de intenso trabajo, desvelos, trabas y tener que hacer magia en esta ciudad Narniana. Entregamos todo, ropa, calzado, medicamentos, las personas disfrutaron de una cena exquisita, la comida que quedó fue llevada a otras personas que casi viven en los portales de la calle Reina y el parque Curita. Agradecer a todas las personas que donaron, que acompañaron, que sirvieron la comida, que fregaron y limpiaron, que decoraron, que cocinaron que se ofrecieron para estar y dar también su tiempo y su amor", escribió en Facebook Kiriam Gutiérrez.

"Agradecer también a las chicas trans que apoyaron y estuvieron allí a pesar de las “advertencias “ de ser expulsadas de la red Transcuba , y que parece que si se cumplió porque las expulsaron, solo por apoyar y participar en este acto de amor, son muy valientes.

Reímos, lloramos, cenamos, bebimos, bailamos y demostramos que juntas somos mejores, pero juntas desde el alma", agregó.

El fotoreportero Claudio Pelaez también compartió imágenes de la noche de la cena.

"La primera cena. Sucedió esta noche del 23 de diciembre y fue de los momentos más sublimes que ha tenido este año. Cuando todo parece fragmentarse, cuando la inflación parece que nos asfixia Mel, Kiriam y muchos amigos han ofrecido una cena comunitaria para la comunidad trans y personas vulnerables. Una noche donde reímos, bailamos, lloramos, bebimos y compartimos el pan. Una noche que hubiéramos querido fuera interminable. Fue la primera cena y desde ya sabemos que no será la última cena. Cuando parecía que nos quedamos solxs ayer supe que estamos más juntxs que nunca", comentó.

"A veces nos hace falta una recarga emocional, algo que nos devuelva la esperanza, que nos motive a seguir y darnos cuenta que no todo está perdido,que aún quedan personas buenas y con los mismos deseos de echar adelante que tiene uno con sus proyectos. Ayer, fue una de esas noches, a pesar de los obstáculos,del intento de opacar una iniciativa que sirvió para dar un poco de amor,de luz y de sentido a la vida de personas que por culpa de la misma sociedad siempre han sido discriminadas y que por tanto estas fechas nunca son fáciles. Me llevo disímiles de enseñanzas, de historias que en tan solo unas horas pude adquirir. Fue hermoso y muy emotivo reencontrarme con amigxs que admiro, respeto y adoro, a otrxs que al fin tuve el placer de conocer personalmente pero sobre todo,lo que más me marcó fue la inmensa alegría que se respiraba", escribió por su parte Denis Alex Rodríguez.

"Las disímiles expresiones de agradecimiento, el ambiente tan fraternal, tan pacífico que creamos, porque todo lo que se hace con amor trae buenos resultados. Me siento más que afortunado de haber sido partícipe, de aportar mi granito de arena en una causa tan fantástica como esta. No me arrepiento y me siento orgulloso de una vez más ser fiel a mis principios de humanismo, solidaridad y honestidad, los cuales jamás traicionaré. Dejo claro también que no soporto las injusticias, por tanto siempre estaré del lado de lo que considero justo", concluyó.

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