A un año de las protestas antigubernamentales que acontecieron en Cuba el 11 de julio (11J), el joven activista cubano Marcel Valdés aseguró que no solo cambiaron la realidad de muchas personas, sino de toda la nación.

Valdés, uno de los más activos denunciando las injustas condenas del régimen para los manifestantes, dijo que "aquel 11 de julio marcó un antes y un después en la historia de nuestro país”.

“Hace exactamente un año que les cambió la vida a miles de cubanos, yo diría que le cambió la vida a toda una nación”, apuntó. “Hoy hace un año que mi gente tomó las calles de mi país exigiendo Libertad y cambio de sistema”, refirió.

A Valdés, recordarlo, le produce “una mezcla sentimientos, alegría porque por primera vez en 63 años de dictadura el cubano cogió las calles para luchar por sus derechos, también tristeza porque fueron reprimidos brutalmente por un régimen criminal y hoy día hay más de mil presos políticos en Cuba, pero sobre todo me siento orgulloso de ser cubano porque aquel 11 de Julio marcó el principio del fin de la dictadura Castro-Comunista. #11J”.

En vísperas del primer aniversario de las protestas, varias personas han recordado lo que se vivió ese día.

Orlando Gutiérrez, presidente de la Asamblea de la Resistencia, dijo que el problema de Cuba “no paró el 11 de julio se vio en la universidad de Camagüey, en los jóvenes gritando libertad en el concierto de Carlos Varela y vimos los letreros apareciendo por todo el país y los estamos apoyando desde aquí con todas estas actividades”.

Por su parte, el joven humorista e influencer cubano conocido como “Carnota”, se pronunció sobre lo que ocurrió en Cuba hace un año.

“Este 11 de Julio se cumple un año ya desde que miles de cubanos salieron a las calles a pedir Libertad y una vida digna, sin mentiras y un país donde la esperanza de un mejor futuro sea posible”, dijo.

“Tras el 11 de Julio, cientos de cubanos fueron reprimidos, amenazados y muchos han sido condenados a excesivas e injustas condenas de cárcel, incluso menores de edad. El gobierno de Cuba pretende así amedrentar a los que, ya cansados de dar tanto a cambio de nada, han decidido expresarse libremente”, dijo.

“El pueblo de Cuba es un pueblo triste, empobrecido y cansado. El pueblo de Cuba vive en el miedo y cruza frontera tras frontera, en lágrimas, dejando atrás todo lo que un día tuvo y sus seres queridos, sólo para buscar un pequeño pedazo de libertad que les permita ser felices sin tener la risa obligada lista para la foto. Huir se ha convertido en, probablemente, la única opción, o sufrir el acoso de las autoridades o enfrentar largas condenas de cárcel, sólo por pensar diferente”, añadió el joven que llegó hace pocas semanas a Estados Unidos.

“Yo soy un joven cubano que también he huido buscando Libertad, buscando un mejor futuro, uno en el que el miedo no sea quien dicte mi vida”, refirió Carnota.

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