Un espectáculo de drones que prometía ser una velada inolvidable para las familias en Orlando, Florida, terminó en tragedia cuando Alexander, un niño de 7 años, resultó gravemente herido tras el impacto de un dron. El incidente ocurrió durante un evento en el parque Lake Eola el pasado sábado, mientras el menor disfrutaba junto a sus madres, Jessica Lumedge y Adriana Edgerton.

Según informó Edgerton a través de sus redes sociales, Alexander fue sometido a una cirugía a corazón abierto luego de que el dron lo golpeara directamente en el pecho. La madre expresó su angustia en Facebook: “¡Mi bebé está en cirugía cardíaca de emergencia por un accidente que jamás debió ocurrir! ¡Estoy aterrorizada!”. Acompañó su mensaje con una foto del pequeño en la cama del hospital.

El Departamento de Bomberos de Orlando respondió rápidamente al accidente, mientras que la policía, en colaboración con la Administración Federal de Aviación (FAA), ha iniciado una investigación para determinar las causas exactas del suceso. Andrea Otero, portavoz de la Ciudad de Orlando, explicó que el incidente se debió a “fallas técnicas” durante la presentación.

Un video compartido en redes sociales mostró el caos generado cuando varios drones comenzaron a caer del cielo. Entre los gritos de advertencia, uno de los dispositivos impactó a Alexander, quien quedó inconsciente y sangrando tras el accidente. Su madre relató: “La hélice le cortó la boca y dejó una marca visible en su pecho”.

Alexander fue trasladado de inmediato al hospital, donde los médicos trabajaron para salvar su vida. La familia ha recibido apoyo emocional mientras enfrentan esta difícil situación. En publicaciones recientes, Edgerton indicó que su hijo está “luchando por recuperarse”.

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