La noticia convulsiona a todo aquel buen ser humano que la escuche: Yunaikis Linares, presa de conciencia, debería haber salido ya de la celda de castigo, pero la orden es revocarla un año a régimen de máxima severidad. Así le dijeron ayer en la prisión a su madre, a la cual le impidieron ver a su hija e incluso la amenazaron con prohibirle el acceso a la cárcel de mujeres de Occidente, el Guatao, por un año. 

Niurka armó un escándalo porque su hija se cortó los brazos una vez más a causa de los atropellos que no cesan, pero también porque en los más de tres años, Yunaikis no ha tenido un minuto de paz. La mamá de Yunaikis ha tenido que ver cómo la juventud de su hija se esfuma: su sonrisa, sus planes, su ternura desaparecen por la falta de esperanza. Yunaikis ha aprendido a estar alerta, a volverse dura y cuando la impotencia es más fuerte, pues prefiere dañar su cuerpo como única vía de defensa y de protesta. 

Para las guardias de la prisión eso es bajo nivel cultural; sus burlas y ensañamiento con una presa política que además es inocente y por tanto no debería estar allí, solo demuestran que son ellas las ignorantes y de baja calaña. También revela la podredumbre de la dinámica cancelaria de la Prisión de Mujeres de Occidente, donde impera el ajuste de cuentas y la violencia. 

Por todos los medios posibles, solicitamos la ayuda de todos identificar a la oficial Edelmira Pedroso y a la directora Elizabeth (necesitamos apellido), máximas responsables en la cárcel, de la situación actual de Yunaikis Linares y de su madre Niurka Rodríguez.

¿Cuántas mujeres vulnerables habrán sido vejadas por estas dos sicarias? Si van a seguir haciendo daño, lo mínimo que podemos hacer es exponerlas. 

Por supuesto que los máximos responsables son la Seguridad del Estado y quienes malgobiernan Cuba, artífices del encarcelamiento de Yunaikis y de las torturas continuadas, de las cuales la joven tiene secuelas por todo el cuerpo. 

Estas mismas autoridades son las que le niegan acceso a las prisiones a Amnistía Internacional y a las demás organizaciones que lo han solicitado reiteradamente porque saben que esas prisiones son una vergüenza. 

¡No podemos dejar de solicitarlo y de denunciar las atrocidades que se cometen en las prisiones cubanas!. Nuestros presos están resistiendo y no pueden solos.

Escrito por Anamely Ramos González  

16/11/24

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