El cubano Yoan Cruz Traba, un paciente psiquiátrico de 50 años, fue enterrado por las autoridades sin el conocimiento ni el consentimiento de su familia, según denunció su hermano Yoel Cruz este miércoles en una publicación de Facebook que rápidamente se hizo viral.

Yoan había sido reportado como desaparecido en La Habana desde el 3 de junio de 2025.

“Me mataron a mi hermano”, escribió Yoel, visiblemente indignado, luego de conocer que Yoan había fallecido el 4 de julio, justamente el día de su cumpleaños, tras haber sido internado en el Hospital Julio Trigo por complicaciones derivadas de su estado de salud.

“Mi hermano fue ingresado el 18 de junio con desnutrición, gastroenteritis y complicaciones cardíacas”, detalló.

Antes de eso, según afirma, estuvo en un centro para personas deambulantes, lugar al que habría llegado en estado de abandono. “A mí nadie me dijo nada”, reclamó Yoel, quien desde el 5 de junio había denunciado la desaparición de Yoan ante la Policía Nacional (PNR) y había comenzado una búsqueda activa a través de redes sociales.

Yoel responsabiliza directamente al gobierno cubano, al Ministerio de Salud Pública, al centro de deambulantes y a la policía por la muerte de su hermano, quien padecía una condición psiquiátrica, pero no era agresivo ni estaba recibiendo tratamiento regular en los últimos meses "en Cuba no hay medicamentos", dijo Yoel Cruz.

En su mensaje, lamentó que nunca recibió visitas de trabajadores sociales, psicólogos ni funcionarios del sistema de salud durante el tiempo en que su hermano estuvo en casa. “Lo único que iba era una enfermera cada cinco meses a ponerle su inyección”, aseguró.

“¿Quién autorizó a enterrar a mi hermano? ¿Por qué no me buscaron si yo mismo lo estaba publicando como desaparecido?”, se preguntó en su publicación. “Lo hicieron a propósito, y hago responsable a este gobierno de la muerte de mi hermano.

Un paciente psiquiátrico no puede ser tratado así”.

La muerte de Yoan y su entierro sin previo aviso a los familiares ha generado conmoción en redes sociales y ha reavivado críticas sobre el trato institucional a personas vulnerables, especialmente con padecimientos mentales, y la falta de protocolos efectivos para notificación familiar en casos de fallecimientos.

Yoel finalizó su denuncia con un mensaje contundente: “Me mataron a mi hermano. Y a mí me van a tener que matar también. Yo no le tengo miedo a la muerte. Ya yo estoy muerto. No me vengan a decir que es culpa del bloqueo. Esto es culpa de ustedes”.

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