Los Dodgers de Los Ángeles igualaron la Serie Mundial al vencer este sábado 5-1 a los Azulejos de Toronto, gracias a una soberbia actuación del lanzador japonés Yoshinobu Yamamoto. Por su parte el cubano Andy Pagés, conectó su primer hit en un Clásico de Otoño.

Yamamoto se robó todos los reflectores al lanzar un juego completo de nueve entradas, permitiendo solo cuatro imparables y una carrera, sin conceder boletos y ponchando a ocho rivales. Con esta joya monticular, se convirtió en el primer pitcher en lanzar un complete game en una Serie Mundial desde 2015 y el primero en lograr dos juegos completos consecutivos en postemporada desde 2001.

El duelo se mantuvo cerrado hasta la séptima entrada, cuando los Dodgers rompieron el empate con jonrones consecutivos de Will Smith y Max Muncy. Smith fue también figura ofensiva con tres carreras impulsadas, mientras que el conjunto angelino amplió la ventaja en la octava con dos anotaciones más, una por lanzamiento descontrolado y otra por jugada de selección.

En ese mismo episodio, el joven cubano Andy Pagés se apuntó su primer imparable en la Serie Mundial, un sencillo que abrió la ofensiva decisiva de los Dodgers. Su batazo, aunque discreto en apariencia, tuvo un valor simbólico en su estreno a este nivel.

Con esta victoria, los Dodgers empataron la serie 1-1 antes de viajar a Los Ángeles, donde buscarán tomar la delantera ante unos Azulejos que habían dominado en el juego inicial. Yamamoto, con su clase y control, dejó claro por qué fue una de las grandes adquisiciones del béisbol de las Grandes Ligas este año.

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