Algo que ya se ha hecho usual en Cuba, el "arrebato" en plena calle de un móvil, fue esta vez evitado. Y es que un delincuente fue atrapado y retenido por vecinos del barrio Dolores en San Miguel del Padrón, La Habana, luego de que el sujeto amenazó a un menor de edad con un cuchillo para robarle.

Aunque el ladrón consiguió arrebatar a la víctima una mochila que tenía dentro un teléfono celular y se mandó a correr, numerosos testigos lo siguieron hasta que consiguieron capturarlo, según reveló el perfil oficialista de Facebook El Cubano Fiel.

Tras ser interceptado, el hombre -cuya identidad no trascendió- fue retenido por los vecinos, quienes llamaron a la policía. “Cuentan además que, después de la llamada realizada al 106 por vecinos del lugar, llegó la patrulla 143 de la policía y se llevó preso al delincuente para la 11na unidad”, concluyó la fuente oficialista.

No es la primera vez, en los últimos meses, que incluso menores de edad son víctimas de robos callejeros en Cuba, ello en medio del creciente aumento de actos delictivos de toda naturaleza a lo largo y ancho de la Isla. En el apartado comentarios de la publicación varios internautas celebraron la resolución del hecho e hicieron votos para que el individuo realmente pague por su delito y no sea liberado en cuestión de horas.

Sin embargo, por un ladrón capturado hay decenas que no lo son. Por ejemplo, un caso similar al de San Miguel el Padrón pero que no corrió con la misma suerte se dio hace unas semanas frente a una escuela secundaria en el municipio capitalino Plaza, en la barriada de Nuevo Vedado, cuando dos adultos en motorina se abalanzaron contra tres adolescentes arrebatándoles mochilas y teléfonos, sin que nadie pudiera hacer nada por la rapidez con la que actuaron. Esos actos de impunidad son cada vez más habituales en un país donde impera la miseria y la delincuencia.

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