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Una realidad repetida: la Ciudad Maravilla se hunde en el lodo

Redacción de CubitaNOW ~ sábado 18 de enero de 2025

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El profesor Gustavo Arcos no es cualquiera. Crítico de cine, ensayista, profesor, graduado de Historia del Arte por la Universidad de La Habana. Imparte clases de cine en la Facultad de Medios de Comunicación Audiovisual (FAMCA) y en la Universidad de las Artes desde el año 1999, entre otras importantes funciones pedagógicas y artísticas. No es cualquier persona aunque cualquier persona puede ver y hablar del deterioro manifiesto de la capital cubana.

"9am. Vedado. A cien metros de La Rampa. Es lo que llamamos el barrio. Donde nací hace 60 años. Mi familia, amigos, vecinos, gente anónima, gente que está y que también se fue. Ya nada es como antes. Ahora la basura invade las aceras, ocupa las calles, esquinas, impide el paso, mutila y corrompe la existencia de la gente. 

"¿Es algo puntual, local? No, toda la ciudad está consumida por la basura, moscas, ratas, pestilencia. Nadie se salva. Es ahora mismo un sello que identifica la capital de esta nación. Las señas del derrumbe, el fracaso, la desidia, la parálisis de toda gestión administrativa, de todo el sentido mínimo de una civilización. 

"Calles N, 25, 27. A solo 50 metros del Ministerio de Salud Pública hay tres grandes basureros. También está el Ministerio de Justicia y del que fue, por décadas, el de la principal industria del país, el Azúcar. ¡Vaya imagen de nación! ¡Sin azúcar no hay país!. Alguien dijo una vez. 

"Llegan obreros de ETECSA, de la Empresa Eléctrica, del gas y rompen calles y aceras una , dos, diez veces. Heridas , cicatrices por toda la ciudad. Nadie arregla, nadie asume responsabilidades. Es ya, ¡sálvese quien pueda!

"Mientras tanto las autoridades hablan de principios, de respeto, de valores, de justicia, de bienestar social. 

¿Como puede ser honorable un gobierno que no puede recoger su propia basura? 

"No hay luz , ni agua, ni alimentos, ni transporte, ni medicinas, ni salud, ni viviendas, ni economía, ni dinero, ni bancos. Todo está fracturado, carcomido, funcionando desde la precariedad, la impotencia, el olvido.

"Algunos hablan de Revolución. Las palabras que devoran las palabras, como dijera Alea en una grandiosa película. Mientras tanto reprimen en su nombre, acusan, sancionan, destruyen el país, en su nombre ¿De que Revolución están hablando?  

"Si lo que vemos cada día en nuestro barrio es la Revolución entonces habrá que volver a hacerla. Empezando por devolverle su real sentido. Hermosa palabra convertida en dogma, parálisis, basura y muerte". Del perfil de Facebook de Gustavo Arcos. Profesor de la FAMCA



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