Una cubana sorprendió a Miguel Díaz-Canel, en el encuentro que sostuvieron algunos emigrados con el gobernante en Dublín.

En el video que publicaron en las redes sociales, Annarella Grimal reseña: [le expliqué que] “más importante que la unidad era lograr la tolerancia entre cubanos, que la ideología no podía ser el centro de todo y terminé diciendo que como mismo veía bien el incremento salarial, no aprobaba la prohibición de entrada impuesta por el gobierno a muchos ciudadanos cubanos”.

La cubana hizo una tremenda disertación en pocos minutos argumentando, lo que llamó uno de los peores problemas de Cuba “la discriminación por razones ideológicas”.

En el video se oye a Díaz-Canel rebatiéndole “que los cubanos nos excluimos a nosotros mismos”, algo que Grimal hubiese querido discutirle pues como es lógico son miles los antillanos “víctimas de la exclusión de estado”.

“Me dio la impresión que al presidente no le gustó y confieso que cuando al final el Ministro Bruno me preguntó mi nombre y mis apellidos, cuando le repetí el castigo de los ocho años, lo primero que pensé fue que me pondría en una lista negra ”, explica la cubana.

En tanto, agrega “ellos son los que dictan e imponen medidas. Yo no tengo que repetirles lo que ellos saben mejor que yo pero que no están en condiciones de reconocer”.

Annarella Grimal termina su relato del encuentro con el gobernante de la Isla con unas emotivas palabras “no creo que un cubano de verdad, humano, honesto y justo deba imponer la separación familiar, el destierro y la discriminación, por ningún motivo, a otro cubano que jamás ha cometido un delito, de acuerdo a las leyes internaciones y a la Constitución de Cuba”

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