Prosiguen las especulaciones tras el concierto de Bebeshito. Prensa oficial cubana defiende al reguetonero y califica a Otaola de 'innombrable'
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 3 de enero de 2025
La prensa oficialista cubana salió en defensa del reciente concierto del reguetonero Bebeshito en Miami y calificó a Alexander Otaola de "innombrable". Un podcast de la periodista Arleen Rodríguez Derivet, reproducido por Cubadebate, expresó que la actuación de Bebeshito el pasado 28 de diciembre fue "una nueva derrota del innombrable" y celebró el "sonado ridículo de Otoala" al pronosticar que el estadio no se llenaría.
"El innombrable no pone una. Quítenle el cartel de influencer que no parece influir ya sobre nadie. Salvo para llevarle la contra", expresó la periodista Bárbara Betancourt en la grabación. Los defensores del régimen recordaron unas declaraciones de Miguel Díaz-Canel en el último Congreso de la UNEAC, en el que el gobernante prácticamente hizo una apología del reguetón: criticó "las expresiones de menosprecio o subestimación desde posiciones a veces elitistas" hacia el género y pidió sumarlo a la política cultural de la revolución.
El artículo señala que el estado cubano "no ha estado de espaldas al fenómeno" y admite que como mismo abarrotó un estadio de Miami "en Cuba abarrota otros locales".
Esta no es la primera vez que periodistas del régimen se posicionan a favor del innegable éxito que tuvo el concierto de Oniel Bebeshito en el "Pitbull Stadium" de Miami, donde se reunieron 20 mil personas.
Al día siguiente del suceso, Ana Teresa Badía de Radio Rebelde escribió en Facebook que "nunca antes un cubano del género urbano había protagonizado un espectáculo de tanta magnitud en Estados Unidos". Badía apuntó la necesidad de políticas culturales más inclusivas que fomenten una educación artística sólida y promuevan letras "menos groseras y más aportadoras", y subrayó que el género repartero es un fenómeno cultural, sociológico y comunicacional que no puede ser ignorado.
El periodista especializado Oni Acosta Llerena adoptó una postura más analítica, señalando que el contexto es esencial al evaluar el alcance de estos fenómenos musicales: "Veinte mil personas en Miami, epicentro del reguetón y el reparto para audiencias de origen cubano y latino, no es un medidor definitivo".
Ambos coincidieron en la importancia de estudiar lo que se promueve y consume en Cuba, dejando claro que el impacto masivo del reguetón es innegable.
El concierto de Oniel Bebeshito en Miami fue considerado un hito porque logró llenar el "Pitbull Stadium" con 20 mil personas, siendo el primer reguetonero cubano en conseguirlo en Estados Unidos. Este éxito refleja el creciente impacto del género urbano cubano a nivel internacional.
Alexander Otaola reaccionó de forma irónica al éxito del concierto, resaltando que el estadio estaba "lleno en un 80%" y que los asistentes corearon su nombre. Su figura se mantuvo como tema de tendencia, a pesar de sus críticas previas sobre la capacidad de Bebeshito para llenar el recinto.
El éxito de Bebeshito representa un avance significativo para la música urbana cubana, consolidando su influencia en Estados Unidos y proporcionando un modelo a seguir para otros artistas del género. Este evento subraya la creciente aceptación y el potencial del reguetón cubano en el ámbito internacional.
El respaldo del régimen cubano al reguetón refleja un intento de integrar este género popular en su política cultural, buscando legitimidad y conexión con las masas. Las declaraciones de Miguel Díaz-Canel sobre el reguetón resaltan un esfuerzo por aceptar y promover el género como parte de la identidad cultural cubana, a pesar de las críticas elitistas que ha enfrentado.
Valdría la pena preguntarse, parafraseando a la destacada cantante Aymée Nuviola, si Bebeshito pudiera llenar "cualquier lugar" en Cuba, entonces podrían visitar y trabajar en Cuba la propia Aymée, Gema Corredera, Willy Chirino, Albita Rodríguez, Arturo Sandoval... Además, por supuesto, de poder trasmitir por los medios a la prodigiosa cubana más universal Celia Cruz. Indiscutiblemente, llama la atención, la defensa a Bebeshito por parte de los periodistas oficialistas y de la propia cúpula dictatorial. ¡Muy extraño!