La actriz y comediante cubana Zajaris Fernández volvió a captar la atención del público con un testimonio tan honesto como crudo, una mezcla de ironía y dolor que compartió a través de sus redes sociales. Con cerca de 200 mil seguidores en Instagram, la artista se ha ganado el respeto no solo por su talento humorístico, sino por su capacidad de hablar sin filtros sobre temas personales, como lo hizo recientemente al responder preguntas sobre su situación sentimental.

Tras una semana marcada por la polémica debido a sus declaraciones contra su expareja, el rapero Al2 El Aldeano, a quien acusó de maltrato psicológico, Zajaris fue cuestionada por sus seguidores sobre si ha encontrado un nuevo amor. Su respuesta, fiel a su estilo mordaz y sarcástico, fue clara: “Ni casada con S, ni cazada con Z. Ni en pareja. Estoy… bien acompañada”. Una frase ambigua que combina humor con una reafirmación de independencia emocional.

Una segunda pregunta fue aún más directa: “¿Ya hay un nuevo amor?”. Con la misma franqueza que la ha caracterizado, Zajaris desmintió cualquier relación actual y aprovechó para hacer una reflexión más profunda sobre su pasado: “No, no hay nuevo amor. No puede haber nuevo, porque no había viejo tampoco. Eso que había no era amor”. Con estas palabras, desestimó por completo la validez emocional de su relación con Al2, definiéndola como un vínculo que nunca mereció ser llamado amor.

Más que una simple negación, su respuesta fue una declaración de principios. La actriz subrayó que ha aprendido a diferenciar entre lo que parece amor y lo que realmente lo es. “Cualquier mierda no es amor”, afirmó con fuerza, en un mensaje que ha resonado especialmente entre mujeres que han atravesado relaciones emocionalmente destructivas.

En cuanto a su bienestar emocional actual, Zajaris respondió sin rodeos a la pregunta: “¿Eres feliz?”. Su reflexión fue lúcida y alentadora: “Siempre estoy feliz con lo que tengo y con lo que soy. A veces creemos que no somos felices porque las cosas no salen como queremos, o porque nos comparamos con otros”. Una muestra de madurez emocional que evidencia su proceso de sanación y autoconocimiento.

La polémica entre Zajaris y Al2 se intensificó tras el lanzamiento de la canción “A mí” por parte del rapero, una pieza que ella interpretó como una provocación más que como un desahogo artístico. En un reel que rápidamente se volvió viral, la actriz respondió con un mensaje contundente: “Seguiré siendo ridícula, pero nunca traidora”, en alusión a los desprecios que, según contó, recibió durante su relación.

Zajaris también reveló detalles profundamente dolorosos de su historia con el músico: tres interrupciones de embarazo en cuatro años, sin el respaldo emocional de su entonces pareja. Acompañó su testimonio con imágenes elocuentes: lágrimas, una salida del hospital en silla de ruedas y documentos médicos que dejaron claro el sufrimiento vivido. Una experiencia que, según sus propias palabras, enfrentó en soledad, pero que hoy transforma en una poderosa declaración de resiliencia.

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