El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a manifestar su interés en que Groenlandia se convierta en parte del país, asegurando que Washington está dispuesto a realizar inversiones millonarias en la isla.

A través de un mensaje en su red Truth Social, Trump destacó el derecho de Groenlandia a decidir su propio futuro y reiteró que Estados Unidos seguiría garantizando su seguridad, en un aparente intento por influir en las elecciones parlamentarias que se celebran en la isla este martes.

Aunque los comicios no incluyen la posibilidad de votar sobre una anexión a Estados Unidos, Trump aprovechó la ocasión para hacer una oferta económica, asegurando que su administración estaría dispuesta a invertir miles de millones de dólares para impulsar el desarrollo y el empleo en el territorio ártico.

A pesar de la propuesta, la mayoría de los groenlandeses se mantiene firme en su postura de no unirse a Estados Unidos. Según una encuesta reciente de los diarios Berlingske (Dinamarca) y Sermitsiaq (Groenlandia), el 85% de la población rechaza la idea, mientras que solo un 6% la apoya.

El primer ministro de Groenlandia, Múte B. Egede, reafirmó la soberanía de la isla y descartó cualquier intención de ceder ante Washington.

“Groenlandia es nuestra. No queremos ser estadounidenses ni daneses, somos groenlandeses. Estados Unidos debe entender que no estamos en venta”, declaró Egede este lunes.

Ubicada entre América y Europa, Groenlandia es de gran importancia geoestratégica y alberga recursos minerales valiosos, incluidos elementos raros esenciales para la tecnología y la industria.

Aunque la isla busca avanzar hacia la independencia, su dependencia económica de Dinamarca, que cubre el 40% de su presupuesto, sigue siendo un obstáculo para su plena autonomía.

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