El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, calificó de “triple sabotaje” los incidentes ocurridos durante su participación en la 80° Asamblea General de la ONU, e instó a que se identifique y arreste a los responsables de los fallos que afectaron su intervención.

En un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump relató que los problemas comenzaron al subir a la escalera mecánica de la sede de la ONU junto a la primera dama, Melania Trump, la cual se detuvo abruptamente, obligándolos a continuar a pie. “Es increíble que Melania y yo no nos cayéramos sobre los bordes afilados de los escalones”, aseguró.

Al iniciar su discurso ante la Asamblea General, Trump denunció que el teleprompter dejó de funcionar durante los primeros 15 minutos, obligándolo a improvisar parte de su intervención. Además, aseguró que el sistema de sonido presentó fallas, impidiendo que los asistentes escucharan con claridad sus palabras. Según él, incluso Melania le informó que no había podido oír el discurso.

“Esto no fue una casualidad. Fue un sabotaje deliberado en la ONU. Los responsables deberían estar avergonzados y presos”, afirmó el mandatario, quien indicó que también solicitó al Servicio Secreto estadounidense que revisara los registros de seguridad y conservara las grabaciones de la escalera mecánica.

Trump aprovechó para criticar duramente a la ONU, a la que acusó de fracasar en sus iniciativas de paz en Gaza y Ucrania, y de financiar la migración ilegal. El presidente insistió en que los incidentes no fueron fortuitos y exigió una investigación inmediata.

Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas desestimó las acusaciones y ofreció explicaciones técnicas. Stephane Dujarric, portavoz del secretario general, detalló que la detención de la escalera mecánica se produjo de manera involuntaria, cuando un camarógrafo de la delegación estadounidense activó el mecanismo de seguridad.

En cuanto al teleprompter, la ONU aclaró que el equipo era operado exclusivamente por personal de la Casa Blanca y que cualquier fallo dependía de ellos. Sobre el sistema de sonido, la organización no emitió un pronunciamiento directo, limitándose a señalar que no se trató de una falla general del auditorio.

El martes, Trump había restado importancia a los eventos e incluso bromeó sobre la escalera mecánica; sin embargo, al día siguiente reafirmó que los incidentes representaban “una vergüenza real” y exigió que los responsables fueran identificados y sancionados.

(Con información de AFP, AP y EFE)

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