Washington DC se prepara para un desfile militar sin precedentes el próximo 14 de junio, en ocasión del Día Nacional de la Bandera y el 250 aniversario del Ejército de Estados Unidos. Sin embargo, el evento ha quedado envuelto en polémica luego de que el presidente Donald Trump advirtiera que cualquier manifestación en contra será enfrentada con “un uso excesivo de la fuerza”.

Desde la Oficina Oval, el mandatario declaró que quienes protesten “odian a nuestro país” y se “enfrentarán a consecuencias graves”. A pesar de que no hay protestas programadas directamente en relación con el evento, las autoridades locales y federales han entrado en estado de máxima alerta.

“Se trata de gente que odia a nuestro país y se enfrentarán a consecuencias graves”, insistió Trump. Esta postura ha sido duramente criticada por activistas y defensores de derechos civiles, quienes alertan sobre un patrón creciente de autoritarismo en el discurso oficial.

El grupo No Kings, abiertamente contrario a la actual administración, anticipó más de 1,800 protestas a lo largo del país como respuesta al despliegue militar y a las amenazas del presidente.

Aunque la mayoría no se realizarán en Washington DC, la Policía de Parques ha informado que se encuentran revisando varios permisos relacionados con la Primera Enmienda.

“La tensión en la capital es palpable. Las fuerzas de seguridad se han preparado como si esperaran un conflicto de gran escala. Se desplegarán miles de agentes y se restringirá el acceso a través de controles severos, prohibiendo mochilas grandes, drones, armas, globos y otros objetos. Todo será vigilado bajo el protocolo de Seguridad Nacional Especial (NSSE), categoría reservada para actos de alto riesgo", afirman autoridades.

El desfile contará con una exhibición militar de gran magnitud: más de 100 vehículos blindados, incluidos tanques M1A2 Abrams, helicópteros Apache, tropas con uniformes históricos de distintos conflictos bélicos, paracaidistas y fuegos artificiales.

Además, habrá un concierto gratuito abierto al público. Trump ha defendido el costo del evento, estimado entre 25 y 45 millones de dólares, como “una inversión en el orgullo nacional”.

“Tendremos un desfile fantástico el 14 de junio, Día de la Bandera. Será un día increíble. Vamos a celebrar a nuestro país, para variar”, afirmó Trump, quien también cumple 79 años ese mismo día.

Mientras tanto, defensores de derechos civiles advierten que las declaraciones presidenciales cruzan líneas preocupantes. Lo que debería ser una celebración nacional se perfila como una jornada marcada por la polarización y el temor a represalias.

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