Sergio Ortega, reconocido narrador deportivo cubano, dejó Cuba y llegó a Miami el 29 de diciembre de 2024 acompañado por su familia, según informó el periodista Henry Morales en la plataforma X. La noticia marca un giro importante en la vida de este comentarista, quien, tras décadas de trabajo en los medios estatales cubanos, se une a la creciente ola migratoria que busca mejores oportunidades fuera de la isla.

Aún no se han revelado detalles sobre las circunstancias de su salida. No está claro si Ortega llegó a Estados Unidos bajo el programa de parole humanitario o mediante una visa de reunificación familiar. Lo que sí es evidente es que la compleja crisis económica y social en Cuba ha llevado a numerosos profesionales, incluidos referentes mediáticos como Ortega, a emigrar en busca de estabilidad.

Ortega, de 67 años, construyó una destacada carrera en la radio y televisión oficialistas. Aunque originalmente se graduó como ingeniero hidráulico, encontró su verdadera vocación en los medios deportivos en 1994, cuando comenzó a trabajar en la emisora COCO de La Habana. Con el tiempo, se especializó en narrar eventos de baloncesto, voleibol y fútbol, ganándose el reconocimiento del público por su estilo único y profesionalismo.

Durante casi tres décadas, Ortega formó una dupla memorable con Renier González, narrando importantes eventos deportivos, incluidos los Mundiales de Fútbol y las Copas del Mundo de Atletismo. Sin embargo, su labor no estuvo exenta de desafíos, incluyendo las críticas por errores cometidos durante transmisiones, algo que él atribuyó a las dificultades de narrar desde estudios en lugar de estar presente en los estadios.

El traslado de Ortega a Miami marca el inicio de una nueva etapa. Este cambio subraya, además, la pérdida de talento profesional que enfrenta Cuba debido a la incapacidad del gobierno de garantizar condiciones de vida dignas y oportunidades de desarrollo. A pesar de los años de lealtad al sistema mediático oficialista, Ortega, como tantos otros, ha optado por un futuro lejos del control estatal, en un entorno donde podrá explorar nuevas posibilidades.

Mientras su futuro en el sur de Florida aún está por definirse, la trayectoria de Sergio Ortega sigue siendo un legado para los amantes del deporte cubano, quienes ahora lo seguirán desde la distancia.

(Con información de "Periódico Cubano")

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