El periodista independiente Guillermo del Sol lleva hoy 39 días en huelga de hambre, para exigir al gobierno cubano que deje de prohibir la salida del país a miembros de la sociedad civil independiente.

"Muy decaído (...), no tengo fuerzas casi. Tomo pequeñas cantidades de agua, pero me da mucho asco, muchas náuseas y deseos de vomitar", comentó del Sola en medio de la debilidad.

El huelguista añadió, en conversación con Radio Martí que Mara Tekach, encargada de negocios de la embajada estadounidense en La Habana, se comunica constantemente con él para interesarse por su salud.

"Ha mostrado preocupación y ha estado al tanto de la situación", agregó, en tanto indicó que el reto que el exgobernante cubano Raúl Castro le ha planteado se mantiene hasta las últimas consecuencias.

"Voy a seguir reclamando hasta el último día porque se cumpla lo expuesto en la

Constitución", sentenció.

Según rememora el citado medio, del Sol “comenzó su protesta pacífica el 12 de agosto, después de que en el aeropuerto José Martí de La Habana las autoridades de migración prohibieran a su hijo, Adrián del Sol Alfonso, abordar un vuelo con destino a

Trinidad y Tobago, donde participaría en un evento sobre libertad religiosa. Al despachar su equipaje el joven fue informado de que estaba

"regulado".

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