Se reportan casos de fiebre de Oropuche en La Habana sin respuesta oficial
Redacción de CubitaNOW ~ jueves 6 de junio de 2024
El virus de Oropouche, que recientemente afectó a Santiago de Cuba, Cienfuegos y Mayabeque, ha llegado a La Habana. Se han reportado casos en los municipios de Diez de Octubre y Centro Habana, según testimonios de los residentes, ya que las autoridades no han confirmado ni divulgado esta información.
En el barrio de Lawton, vecinos de la calle Pocitos informaron sobre la presencia del virus en un edificio cercano a la calle 10, donde varias personas han presentado síntomas asociados a la fiebre de Oropouche. En el consultorio médico local se les ha recomendado descanso, evitar esfuerzos físicos y mantenerse hidratados, según uno de los infectados.
"Empecé a sentirme mal, luego llegaron las fiebres intensas y un dolor generalizado en el cuerpo", relató un hombre de 71 años que no quiso revelar su nombre. "La enfermera de la zona mencionó que podría ser el nuevo virus que comenzó en Oriente, pero no nos han hecho pruebas ni nada. Seguimos las indicaciones pero estamos preocupados porque en este edificio todos somos mayores".
Este residente también mencionó que cerca del edificio hay un charco de agua estancada debido a una tubería rota, lo cual ha favorecido la proliferación de mosquitos, potenciales transmisores del virus. "Los mosquitos que salen de esa agua no nos dejan vivir, especialmente por las noches", añadió.
El virus de Oropouche tiene un periodo de incubación de 4 a 8 días, pudiendo extenderse hasta 12, y causa síntomas como mialgias, cefalea, escalofríos, erupción cutánea, y en ocasiones, náuseas y vómitos persistentes. En el caso de los vecinos de Lawton, todos han tenido que guardar reposo y algunos ancianos se han sentido muy mal, aunque ninguno ha sido hospitalizado.
A pesar de que los trabajadores sanitarios han mencionado la fiebre de Oropouche en sus contactos con los enfermos, no se ha proporcionado documentación oficial ni se ha informado a otros niveles. La falta de información en los medios de comunicación ha incrementado la preocupación entre los residentes, especialmente debido a los graves problemas de limpieza e higiene en la ciudad.
El mosquito Culex, principal transmisor del virus, se reproduce en aguas estancadas y se alimenta de material orgánico y plantas. La Habana, con sus problemas de abastecimiento de agua y recolección de basura, es un entorno ideal para la propagación de este vector.
En Pueblo Nuevo, Centro Habana, también se han reportado posibles casos de Oropouche. "Un vecino que regresó recientemente de Santiago de Cuba comenzó a sentirse mal", informó una residente de la calle Zanja. "Poco después, varios casos similares aparecieron en la cuadra".
En el policlínico cercano se reiteraron las recomendaciones de descanso, hidratación y espera. Los vecinos han adoptado medidas como usar mosquiteros, mantener puertas y ventanas cerradas, y aplicar repelentes para alejar a los mosquitos.
"La situación es difícil porque hay una montaña de basura en la esquina", lamentó una mujer. Una enfermera local ha dado instrucciones a través de WhatsApp para evitar salidas innecesarias, revisar focos de mosquitos en casa y esperar a que el organismo combata el virus.
El alivio de los síntomas y la provisión de alimentos también representan un reto. "Mi vecina de 83 años lleva tres días con fiebre y solo quiere sopa de pollo. Hemos tenido que organizarnos para ayudarla porque vive sola y no tiene comida en casa", explicó una residente. "Cuando fuimos a cocinarle la sopa, se fue la luz y tuvo que esperar cuatro horas para poder comer algo caliente".
Esta situación refleja la complicada realidad que enfrentan los habaneros mientras la fiebre de Oropouche se extiende en silencio por la ciudad.