Santiago de Cuba vive momentos críticos que han encendido las alarmas de la población y generado llamados urgentes para declarar una “alarma sanitaria”. La denuncia proviene de ciudadanos como Yosmany Mayeta, quien ha utilizado sus redes sociales para alertar sobre la situación.

Según Mayeta, la propagación de un virus está afectando gravemente a la ciudad, con familias enteras contagiadas y fallecimientos que reflejan la gravedad del brote. Sus palabras reflejan la desesperación de quienes viven de cerca esta crisis: “Es momento de que decreten alarma sanitaria para Santiago de Cuba”, clamó en su publicación, acompañada de etiquetas que buscan viralizar la emergencia: #subelomayeta, #súbelomayeta, #SantiagodeCuba.

Los comentarios de los vecinos pintan un panorama devastador. Rosa Nelsa Heredia Martínez afirma que en varias casas todos están contagiados y denuncia la falta de medidas básicas de higiene urbana: la basura no se recoge y, mientras tanto, recursos como combustible se desperdician en helicópteros sin soluciones reales para contener el virus.

Hetzy Ruth Vizcaino comenta que la situación “está bastante fuerte”, mientras Darina Alarcón explica que muchas personas sienten síntomas extraños, sin entender que el virus puede estar presente aunque los mosquitos no piquen.

La tragedia también se refleja en historias personales dolorosas. Sarita Torres comparte la pérdida de su abuela, mientras Cruchi Rosales alerta que “la gente se muere” sin que nadie intervenga.

Mariela Cruz hace un llamado directo a las autoridades: Santiago necesita medidas urgentes, pide que se detenga la propagación del virus y que se proteja a los ciudadanos. Otros comentarios reflejan indignación ante la inacción: Mulatica Karla Enzo critica que el gobierno no está tomando precauciones antes del inicio de las clases y Mercedes Duanis Cabrera describe los efectos debilitantes del virus, alertando sobre la gravedad de la enfermedad y pidiendo ayuda divina.

La suma de estas denuncias revela un panorama alarmante: familias enteras contagiadas, pérdida de vidas, carencia de medidas sanitarias y falta de respuesta oficial. Los santiagueros expresan su temor, su dolor y su impotencia, insistiendo en que se tomen medidas inmediatas para contener el virus y evitar que la crisis se agrave.

Santiago de Cuba clama por atención, por acciones concretas y por el reconocimiento de la emergencia que está afectando a toda la comunidad.

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