Una familia pagó mil pesos a un carro para trasladar a una anciana grave del policlínico de San Juan y Martínez al Hospital de Pinar del Río.

En el pueblo, de casi 50 mil habitantes, no hay ambulancia. El policlínico renta un carro particular para uso interno pero a la señora la bajaron del vehículo porque "lo necesitaban" para llevar a sus casas a dos enfermeras del lugar.

"Hoy mi abuela Tania Morales Puentes vecina de la localidad sanjuanera fue llevada por la familia al policlínico Modesto Gómez Rubio con grave falta de aire y dolor en el corazón con la necesidad de ser trasladada de urgencia al Hospital Provincial (donde se encuentra ahora en Terapia)", denunció el periodista José Antonio Rigual.

"Resulta que no hay una sola ambulancia para un territorio de cerca de 50 mil habitantes. No hay una ambulancia para 50 mil gente pobre, pero hay carros y gasolina para que los poderosos nietos se paseen en un Mercedes Benz o para que los cuadros se paseen en sus carros estatales como si fueran de uso personal", cuestionó.

Según cuenta el director del policlínico le dijo a su familia que había un carro particular rentado por el policlínico pero cuando acomodaron a la anciana, al borde de la muerte, la bajaron par subir a dos enfermeras y llevarlas a sus casas.

"¿Díaz-Canel tu no dices que la vida es lo más importante? ¿Importan de verdad o es discurso vacio? A esas horas mi familia tuvo una acalorada discusión con el director del policlínico que sobre su moto eléctrica parecía burlarse de las necesidades y urgencias de la gente a la que le debe su servicio y la que paga su salario. Finalmente tuvieron que pagar mil pesos a otro particular para que mi abuela no muriera ahí en el parqueo del policlínico", dijo.

El joven cuestionó que los defensores del régimen echen en cara a Mailen González (la única sobreviviente del accidente aéreo en La Habana) las críticas al sistema de salud "al que ella, como mi abuela, no tiene mucho que agradecer; porque lo pagamos todos los cubanos con los pocos recursos que tenemos con las remesas y con el trabajo; es público, pero no es gratis. Es accesible, pero es malo".

"Te equivocaste, querido director, y te equivocas tú y todo el que crea que ellos no tienen voz. Yo soy su voz y voy a gritar alto la verdad. Para callarme por denunciar lo que creo mal hecho van a tener que cortarme la garganta y aun sin hablar les voy a dar batalla y que mi sangre sea semilla", comentó.

"¿Dónde está la potencia médica? ¿Dónde está la igualdad y libertad plena, donde la modestia el desinterés el altruismo? Yo miro al horizonte de un país y me cuesta verla cuando pasan estas cosas, cuando pasan tan a menudo. Mientras escribo esto, mi abuela se puede morir, y tendrá un lindo viaje al universo, pero yo me siento complacido, complacido dentro de la indignación y el asco que me provocan sus mentiras y el trato a su pueblo, que no es suyo, que no son ustedes, el pueblo que aguanta los apagones, ese es mi pueblo", agregó.

En su publicación de Facebook, José Antonio Rigual compartió imágenes del auto en el que se negaron a trasladar a su abuela de urgencia y que está pagando el pueblo para eso. "El que está señalado en el círculo sobre su moto eléctrica es el abusador director del policlínico y dentro del auto se ven las dos enfermeras. El chofer también estuvo de acuerdo en no llevarlos", precisó.

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