Sagua la Grande se apaga: hospitales sin médicos, apagones interminables y un pueblo al límite
Redacción de CubitaNOW ~ miércoles 12 de noviembre de 2025
En Sagua la Grande, provincia de Villa Clara, la realidad supera la ficción; supera cualquier discurso oficial. El policlínico "Mario Antonio Pérez" está colapsado. Desde niños hasta ancianos esperan atención médica sin suerte: no hay médicos de guardia; los pocos que quedan están enfermos y el subdirector tuvo que asumir la guardia porque no tiene personal disponible.
En el laboratorio no hay quien realice análisis clínicos, tampoco hay reactivos, ni siquiera los instrumentos básicos para tomar la presión o la temperatura. El caos sanitario se combina con apagones interminables, que este martes solo dieron tres horas de electricidad a la población.
“Si no nos mata el mosquito, nos mata la situación”, escribió una vecina en redes sociales, denunciando que los apagones impiden el descanso y agravan los problemas de salud. La planta eléctrica del policlínico solo se encendió cuando empezaron a llegar enfermos.
Mientras tanto, los comentarios en Facebook reflejan el hartazgo colectivo:
“Esto ya no da más”, dice Dunia Caleb, “Nos están matando lentamente” añade Lisleydi Pérez León, “Sagua fue guapa una vez, está en la historia”, lamenta Gladys Aponte.
El pueblo señala que los dirigentes solo piensan en ellos mismos, mientras la población enfrenta una emergencia sanitaria y humanitaria sin precedentes. No hay medicamentos, no hay médicos, no hay electricidad y, lo que es peor, no hay esperanza.
En las redes, muchos recuerdan el cinismo del régimen que repite su propaganda mientras el país se derrumba. “Díaz-Canel sin GAO” —una ironía popular que circula en internet— resume el sentir de un pueblo que ya no cree en excusas.
“Esto tiene que parar”, dicen los sagüeros. Pero en Cuba, donde la resignación ha sido política de Estado, el clamor de la calle aún espera transformarse en acción. Cada apagón, cada enfermo sin atención y cada niño sin descanso son el retrato de un país que se desangra en silencio.
Fuente: Díaz Canel Sin Gao