“Pido justicia. Nadie ha venido a decirme quién fue ni qué carro la mató. Solo quiero justicia para mi hija.” Con estas palabras, la madre de Mairovis Valier Heredia alza la voz por su hija, una mujer cubana de 35 años que murió trágicamente el 25 de agosto tras ser atropellada en pleno centro de La Habana.

Ese día, Mairovis caminaba por la calle Galeano junto a su hermana, su tía y su prima, cuando un automóvil —supuestamente conducido por un extranjero— se lanzó sobre ellas. Ocho personas resultaron heridas en el incidente en ese momento, pero fue Mairovis quien perdió la vida. Su hermana, aún recuperándose, relató que fue un acto intencional.

“Mi hermana murió dejando tres niños desamparados. Vino a La Habana para buscar trabajo, para luchar por sus hijos y apoyar a su niño que cumple el servicio militar aquí. No merecía esto”, dijo aún conmovida.

Hasta el momento, el Ministerio del Interior no ha revelado públicamente quién era el conductor ni ha ofrecido claridad sobre el estado de la investigación. La familia de Mairovis, junto a cientos de cubanos en redes sociales, exige justicia. Piden que no se deje en el olvido una vida que fue injustamente arrebatada.

En redes, el clamor ha sido unánime: “Justicia para Mairovis”, “Tres niños quedaron sin su madre”, “Que no quede impune esta tragedia”. El video del atropello ha circulado ampliamente, despertando indignación en toda la Isla.

El dolor de una familia, la pérdida de una madre y la ausencia de respuestas claras han encendido una llama de exigencia. No se trata solo de castigar al culpable, sino de evitar que tragedias como éstas sigan ocurriendo sin consecuencias.

Fuente: Alberto Arego

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