El régimen de La Habana no sabe cómo atraer más turistas a Cuba y celebró este lunes en Varadero un evento sobre turismo sostenible, como antesala de la Feria Internacional de Turismo (FitCuba) que se celebra desde este martes y hasta el día 7 de mayo en Varadero, informó la agencia española Efe.

Cuba está implementando medidas para desarrollar un turismo sostenible y armonioso con el medioambiente. Las acciones incluyen la demolición de estructuras permanentes sobre las dunas y el incremento de las zonas de sombra en la franja de arena y espacios públicos, dijo la ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, Elba Rosa Pérez.

Pérez señaló que Cuba tiene "potencialidades" para desarrollar el turismo sostenible, pero reconoció cuestiones pendientes como colocar paneles solares fotovoltaicos en techos o parqueos y desarrollar una arquitectura bioclimática.

La dirigente agregó que las medidas tomadas para avanzar hacia el "novedoso concepto" de la sostenibilidad forman parte del plan estatal "Tarea Vida", una estrategia gubernamental puesta en marcha en 2017 para mitigar los efectos del cambio climático en la isla caribeña, reseñó Efe.

El ministro de Turismo de Cuba, dijo que "no se trata solo de adaptar y mitigar los efectos del cambio climático, sino de hacer a nuestros países y destinos turísticos más resilientes, más competitivos y más sostenibles".

El régimen hizo gala de la recuperación de playas de los polos turísticos de Cuba como Cayo Guillermo, Cayo Santa María, Jardines del Rey, destinos de Holguín, entre otros. El proyecto participan es ejecutado por una empresa neerlandesa y otra española (Dragosa), informó la revista Excelencias News Cuba.

La Doctora Ileana Perera Reyes, directora adjunta de la Empresa de Ingeniería del Reciclaje, comentó sobre el Proyecto ECOTURES, un sistema de gestión integral de residuos sólidos en los polos turísticos.

La situación en los polos turísticos a veces es compleja pues se desarrolla en ecosistemas en formación. La gestión actual de los residuos no aporta a la sostenibilidad de la industria turística, existen reservas en la clasificación de estos para su recuperación como materias primas y es necesario rediseñar soluciones tecnológicas para cumplir con los nuevos estándares, dijo la experta.

"El de mayor potencial para impulsar este proyecto es Cayo Santa María, donde ya se han hecho algunas acciones en ese empeño. Como novedad, está la implementación de un sistema biológico para tratar los residuos que permita la obtención de energía eléctrica y térmica, así como biofertilizantes de alta calidad", apuntó.

Los especialistas también destacaron el cuidado de las Cuevas de Bellamar, descubiertas "por accidente", un sistema de cuevas de 25 kilómetros muy hermoso, pero muy frágil al igual que la Caverna de Santa Catalina, entre Matanzas y Varadero, o la Cueva de Santo Tomás, en Pinar del Río.

Según el régimen, en Cuba se trabaja en la recuperación de los arrecifes coralinos en lugares como la Península de Guanahacabibes, el litoral norte habanero, la Isla de la Juventud, el sur de Matanzas, entre otros.

Fabian Pina, especialista ambiental de AVALON Marlin en Jardines de la Reina, vendió ese destino turístico. "Es este el único sitio de Cuba donde desovan y anidan tres especies de tortugas marinas, y el número de nidos ha crecido en los últimos años gracias a la conservación. Los peces, por su parte, han crecido en intensidad en cuanto a biomasa. Por ejemplo, los tiburones aparecen en Jardines de la Reina en números 18 veces superiores a otros espacios que no cuentan con protección, según estudios", apuntó la citada fuente.

El turismo representaba antes de la pandemia la segunda área económica de Cuba, por detrás de la venta de servicios profesionales al exterior, y aportaba cerca del 10 % del producto interno bruto (PIB). También empleaba a aproximadamente medio millón de personas en el sector estatal y un alto porcentaje de trabajadores del sector privado, señaló Efe.

Pese a que Cuba lleva los últimos años con el turismo a la baja, el régimen espera recibir este años 2,5 millones de visitantes internacionales e ingresar unos 1159 millones de dólares. "Las autoridades no han modificado estas previsiones pese a la variante ómicron y las consecuencias de guerra en Ucrania, que ha afectado al turismo ruso", puntualizó la citada agencia. 

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