El ministro de Energía y Minas de Cuba, Vicente de la O Levy, confirmó que 2026 podría mostrar una mejoría parcial en la estabilidad del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), gracias a la incorporación de nuevas unidades termoeléctricas y a la expansión de energías renovables. No obstante, advirtió que los apagones persistirán debido al déficit de combustible que aún afecta al país.

De la O Levy detalló que durante 2025 se realizaron mantenimientos capitales en las unidades Céspedes 3, Renté 5, Céspedes 4 y Este Habana 2, con las dos últimas sincronizándose en diciembre y operando desde enero con potencia estable. Además, se sumaron mil megawatts de energía solar y se aprovecharon parques eólicos como Herradura 1, lo que permitió que, en algunos momentos, el 30% de la generación eléctrica proviniera de fuentes renovables.

El ministro resaltó que durante el paso del huracán Melissa, provincias como Guantánamo y Granma pudieron operar en “isla energética”, gracias a la generación distribuida. Este logro impulsó un replanteamiento del diseño regional del sistema eléctrico, evidenciando la importancia de contar con generación local para enfrentar fenómenos naturales.

A pesar de los avances técnicos, el funcionario subrayó que el principal obstáculo sigue siendo financiero y logístico: “Tenemos más de 3 200 MW disponibles técnicamente, pero los apagones persisten porque carecemos de combustible para mover la generación distribuida, que hoy tiene más de 1 000 MW inactivos por esa causa”, indicó. En paralelo, señaló que la disponibilidad de grupos electrógenos de emergencia supera el 80%, lo que permitió mantener servicios esenciales durante más de un mes en zonas afectadas por el huracán.

El titular adelantó que el Plan de la Economía 2026 contempla una disminución de las afectaciones respecto a 2025, pero que no se eliminarán los apagones debido a que las asignaciones de combustible siguen siendo insuficientes. Se mantendrán paradas programadas en termoeléctricas clave, como Guiteras y Felton, aunque para esta última se ha identificado una vía financiera con recursos nacionales para completar su reconstrucción, dentro de la estrategia nacional hasta 2030. Esta estrategia también incluye nuevas unidades en Nuevitas y Mariel.

En cuanto a logística, el ministro destacó la rehabilitación de la base de supertanqueros en Matanzas, considerada esencial para agilizar la distribución de combustible a nivel nacional. Asimismo, agradeció la cooperación internacional, citando la donación de Vietnam de cuatro parques solares de 20 MW y la entrega por parte de China de 5 000 sistemas fotovoltaicos para viviendas afectadas por Melissa.

De la O Levy concluyó que, aunque 2025 fue un año marcado por la mayor escasez de combustible de la última década, 2026 traerá condiciones algo mejores. “Es el comienzo de la transformación energética, pero queda un trecho por caminar”, sentenció, dejando claro que la estabilidad plena del SEN aún está lejos y que los cubanos deberán seguir enfrentando apagones y cortes programados.

Fuente: CMKX Radio Bayamo

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