Manuel Menéndez Castellanos, exsecretario del Partido Comunista en la provincia de Cienfuegos y antiguo miembro del "equipo de coordinación y apoyo" de Fidel Castro, negó en una entrevista de solicitud de visado para Estados Unidos que había pertenecido al Partido Comunista y en un documento de solicitud lo admitió, minimizando ese dato. Basados en esas pruebas, los congresistas cubanoamericanos Mario Díaz-Balart, Carlos A. Giménez y María Elvira Salazar, junto con el Presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jim Jordan, y el Presidente del Subcomité de Integridad, Seguridad y Cumplimiento de Inmigración, Tom McClintock, enviaron una carta dirigida al secretario de Estado, Anthony Blinken.

Los firmantes solicitan la intervención del gobierno federal y que suministre las pruebas de este caso que ha llamado la atención de la comunidad cubana residente en Estados Unidos por la entrada de un represor del régimen castrista con todos los beneficios que la residencia estadounidense le permite, señala la misiva compartida en redes sociales por el periodista de Martí Noticias Mario Pentón.

La carta se remite a la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA) donde dice que un extranjero es inadmisible como inmigrante si "es o ha sido miembro de o afiliado al Partido Comunista, u otro partido totalitario, nacional o extranjero”, por lo que solicitan la explicación por la entrada de Menéndez Castellanos.

En el documento, los legisladores señalan que “según los registros obtenidos por el Comité, en su solicitud de visa de inmigrante y cuando fue cuestionado por funcionarios de inmigración, Menéndez Castellanos negó cualquier afiliación”.

La comunidad cubana en Miami ha expresado su indignación ante la llegada de Menéndez Castellanos, quien ingresó al país a través del proceso de reunificación familiar. Muchos consideran inadmisible que un individuo que jugó un papel clave en la opresión del pueblo cubano durante décadas pueda disfrutar de su retiro en Estados Unidos. La Fundación para los Derechos Humanos en Cuba incluyó a Menéndez Castellanos en su lista de represores de cuello blanco, subrayando su responsabilidad en violaciones a los derechos humanos y crímenes contra la humanidad.

Abogados como Willy Allen y Santiago Alpízar han apoyado la idea de una investigación para esclarecer el proceso de entrevista y verificación que permitió la entrada de Menéndez Castellanos. También han destacado el contraste entre la situación de muchos cubanos que permanecen en un limbo migratorio y enfrentan posibles deportaciones, mientras que exfuncionarios del régimen castrista obtienen privilegios migratorios​.

En relación con esto, el Departamento de Estado ha mantenido la confidencialidad de los registros de visas, citando la ley estadounidense y no ha proporcionado detalles específicos sobre el caso. No obstante, ha señalado que todos los solicitantes de visa están sujetos a un proceso de revisión de seguridad adecuado​.Esto hace prever que el caso Manuel Menéndez Castellanos no ha concluido.

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