Raymar Aguado Hernández: la juventud cubana que no se deja silenciar
Redacción de CubitaNOW ~ miércoles 11 de junio de 2025

El 10 de junio, en horas de la tarde, el jefe de sector de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) del barrio habanero de Cayo Hueso se presentó en la vivienda del joven Raymar Aguado Hernández y le entregó una citación oficial para un supuesto interrogatorio en la estación policial de Águila y Dragones, programado para hoy, 11 de junio. Este acto es interpretado por el Observatorio de Libertad Académica como una nueva maniobra de hostigamiento político por parte de la Seguridad del Estado cubano.
Raymar Aguado Hernández cursa la Láurea Magna en Humanidades en el Instituto de Estudios Eclesiásticos "Padre Félix Varela", formación que combina con una destacada labor ensayística que ya comienza a resonar dentro del pensamiento crítico cubano.
Su compromiso ciudadano lo ha llevado a defender activamente los derechos de la comunidad universitaria, en especial en lo referente al acceso a Internet como herramienta esencial para la educación.
En este contexto, se inscribe su participación en las recientes protestas estudiantiles contra el tarifazo digital, una política del gobierno que encarece y restringe el acceso a servicios de Internet, afectando gravemente a estudiantes, investigadores y docentes.
Estas restricciones no solo limitan el desarrollo académico, sino que pretenden sofocar la organización y el pensamiento independiente dentro de las universidades.
El Observatorio ha advertido que este tipo de acciones policiales responde a una estrategia represiva orientada a desarticular el incipiente movimiento estudiantil cubano, que exige una educación libre, conectada y sin censura. En lugar de dialogar con los jóvenes, el Estado recurre a citaciones, amenazas y presiones, como la que ahora enfrenta Raymar.
El sacerdote Léster Rafael Zayas Díaz expresó su solidaridad en redes sociales: “Raymar no está solo. Raymar son los jóvenes. Raymar es la juventud. Y a los jóvenes, diles que ellos son la dulce esperanza de la patria”, evocando a José Martí para recordar que “no hay patria sin virtud, ni virtud con impiedad”.
Raymar ha hecho pública su negativa a acudir al interrogatorio, afirmando: “Si me quieren callar, tiren a matar. Cuando se lucha por la dignidad y la justicia no puede haber miedo”.
El Observatorio y diversas voces llaman a la comunidad internacional a estar alerta. Raymar no solo representa una causa individual: representa a toda una generación que ya no está dispuesta a callar.