Annie Fonseca, primera mujer en dirigir un equipo masculino en el béisbol cubano, ha calificado su experiencia al frente del equipo de Marianao en la Serie Provincial como "una pesadilla". A sus 40 años, Fonseca asumió el mando con ilusión y valentía, pero encontró un entorno marcado por el rechazo y la falta de respeto hacia su liderazgo.

En un emotivo mensaje publicado en sus redes sociales y del cual se hace eco Alas Tensas, Fonseca señaló que el machismo no solo estuvo presente en los vestuarios, sino también en las gradas y redes sociales. A pesar de liderar al equipo durante una temporada sin victorias (13 derrotas consecutivas), destacó que su objetivo era crear una "familia", algo que se vio frustrado por las creencias patriarcales aún arraigadas en el deporte cubano. ¿Solo en el deporte?

“Solo yo sé cuánto tuve que ser realmente una guerrera para poder estar en pie”, escribió Fonseca, agradeciendo a quienes la apoyaron en medio de las adversidades. A pesar de los malos resultados, reafirmó su fe en la perseverancia y en el cambio: “Las mujeres también tenemos derecho a ganarnos el respeto en el béisbol”.

Entre las mujeres que han descollado en los dugouts beisboleros se cuentan casos como el de la cubanoamericana Verónica Álvarez, directora del equipo femenino de Estados Unidos desde 2019; Rachel Balkovec, quien estuvo al frente de la sucursal de clase A de New York Yankees y Alyssa Nakken, coach de Cleveland Guardians. 

El caso de Fonseca refleja los enormes retos que enfrentan las mujeres en campos dominados históricamente por hombres y abre una necesaria conversación sobre igualdad y respeto en el deporte cubano. 

No es solo en este caso que las mujeres cubanas han sido víctimas de discriminación en el deporte: periodistas, comentaristas deportivas, médicas, psicólogas han tenido que abrirse paso a golpe y fuego. ¡Mucha fuerza para Annie Fonseca... el respeto y la consideración vendrá con el tiempo!

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