Una operación policial en Miami-Dade resultó en la desarticulación de una red criminal dedicada al robo y tráfico de catalizadores de automóviles, culminando en la detención de varios individuos, entre ellos varios cubanos residentes en Florida.

Según la Fiscalía Estatal de Miami-Dade, la investigación, que se extendió por más de un año, llevó a la identificación y arresto de 11 personas involucradas en esta actividad ilícita, con otros dos sospechosos aún prófugos. La fiscal estatal Katherine Fernández-Rundle calificó el robo de catalizadores como una "epidemia" a nivel nacional, señalando la facilidad con la que estos delincuentes pueden obtener grandes sumas de dinero debido al alto valor de los metales preciosos contenidos en los catalizadores, como el platino y el rodio.

Entre los detenidos se encuentra Gerardo Julio Hernández Rosada, propietario de la empresa GMCN Scrap Metals Inc., con sede en Medley, quien es señalado como el principal comprador de los catalizadores robados. En solo un año, su compañía generó 53 millones de dólares, de los cuales se estima que 30 millones fueron producto de actividades ilegales.

Hernández Rosada enfrenta múltiples cargos, incluidos extorsión, conspiración para cometer extorsión, tráfico de propiedad robada, y violación de métodos de pago. Junto a él, otros empleados de su empresa, algunos de ellos de nacionalidad cubana, también han sido arrestados y enfrentan cargos similares.

La operación que permitió descubrir esta red criminal comenzó en mayo de 2023, cuando dos individuos fueron arrestados en Coconut Creek, en el condado de Broward, por robar catalizadores de un hotel. Estos arrestos iniciales condujeron a la revelación de una red más amplia, en la que los ladrones, conocidos como "cutters", vendían los catalizadores robados a GMCN Scrap Metals Inc., obteniendo entre 200 y 700 dólares por cada uno, dependiendo de la marca.

La actividad de esta red no solo afectó a las víctimas directas del robo, quienes se enfrentan a costos de reemplazo que oscilan entre 1,000 y 3,000 dólares, sino que también contribuyó al aumento significativo de las reclamaciones por robo de catalizadores, que se dispararon un 750% en comparación con los cuatro años anteriores.

Las autoridades continúan buscando a los dos sospechosos prófugos, mientras que los arrestados permanecen en custodia, enfrentando una serie de cargos graves que podrían llevar a largas condenas.

Recomendado para ti