Las declaraciones del ex mandatario Donald Trump de eliminar el parole humanitario y controlar la aplicación CBPl ha provocado un intenso debate político ya que quedarían sin amparo migrantes cubanos, haitianos, nicaragüenses y venezolanos a Estados Unidos.Este anuncio se produce en un contexto de creciente preocupación por la migración y su impacto en la seguridad nacional, con el que el republicano prevé conservar el voto conservador en el país. Sin embargo, otro sector que se ha beneficiado de estos programas podría cambiar de opinión con respecto a su intención de voto.

En un mensaje dirigido a los migrantes, Trump advirtió: "Prepárense para irse, especialmente si son criminales". Esta declaración, al igual que su propuesta de cerrar las fronteras, han suscitado reacciones variadas, con críticas tanto de abogados de inmigración como de activistas políticos. Avelino González, abogado especializado en inmigración, destacó en declaraciones a Telemundo 51 que aunque la eliminación de estos programas puede ser ejecutada por un nuevo presidente, la deportación efectiva de migrantes requeriría una orden judicial.

Desde su implementación en enero de 2023, el parole humanitario ha enfrentado múltiples desafíos, incluyendo demandas legales que cuestionan su validez y pausas por casos de fraude. A pesar de su controversial naturaleza, se estima que entre 70,000 y 80,000 inmigrantes ingresan legalmente a Estados Unidos cada mes bajo este programa.

La reacción de miembros del Partido Republicano ha sido contundente. Kevin Cabrera, un líder republicano, criticó la administración de Biden por permitir la entrada de más de 10 millones de personas sin un control adecuado, sugiriendo que esto ha facilitado la llegada de grupos criminales. Luis Fernando Atencio, activista demócrata, cuestionó la seriedad de las propuestas de Trump, argumentando que carecen de un plan claro y son más bien ataques a los inmigrantes.

El impacto de estos comentarios puede ser significativo en el electorado y pudo verse en el debate presidencial entre Trump y su rival demócrata Kamala Harris.

Trump perdió puntos al acusar a los inmigrantes de comer perros y gatos en las zonas cercanas a las fronteras terrestres con México; mientras Harris consiguió tantos a su favor al afirmar que las propuestas de la Administración Biden para resolver el problema migratorio fueron frenadas por influencia de Trump.

Familias que han votado tradicionalmente por los republicanos, pero se han beneficiado de programas como el parole, podrían reevaluar su apoyo a Trump.

Avelino González recordó que las acciones de un candidato no siempre reflejan lo que un presidente puede o quiere hacer, lo que añade un nivel de incertidumbre a la situación.

Mientras tanto, la campaña de Kamala Harris no ha respondido a las inquietudes sobre el futuro de estos programas en caso de una victoria demócrata.

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