Las redes están ardiendo en medio de la polémica generada por el equipo Cuba en el V Clásico Mundial de Béisbol.

Los cubanos lograron pasar a las semifinales tras vencer a Australia 4X3. Este jueves llegaron a Miami, donde jugarán el próximo domingo en el estadio de la Pequeña Habana, sede de los Marlins.

CubitaNOW comparte algunas de las opiniones de cubanos sobre sí este equipo los representa o no.

Para el periodista José Raúl Gallego, "posiblemente no haya mejor símil de esa Cuba que aún permanece bajo el control totalitario que este equipo Cuba que hoy tiene alegre a 3/4 de los cubanos, incluso entre quienes se oponen al régimen. Es sencillo. Este equipo ha sido conformado por una institución subordinada al régimen (Federación Cubana de Béisbol) excluyendo de antemano a jugadores por su posición política. Eso es Cuba hoy y hace 60 años", comentó.

"Excluyó incluso a un jugador que dio el sí (Yasmani Tomás) porque dijo que no participaría en actos políticos. No basta con plegarte a lo que ellos dicen. Tienes que plegarte completo. Si no, te demuestran quién manda realmente. Eso es Cuba hoy. El resto de los jugadores, incluidos los de Grandes Ligas, se quedaron callados ante la injusticia... Los que ayer fueron traidores hoy pueden jugar siempre que aporten su capital y acepten callarse la boca. Eso es Cuba hoy".

"No es un equipo comunista porque no es un equipo asustado. La gente no sabe bien dónde clasificarlos en este segundo, cuando un tipo de serie nacional impulsa a uno de grandes ligas. Puede decirse que generaron una identidad desde la mezcla, que es la única identidad posible, y que ahora mismo están esencialmente clasificando a semifinales gracias a todos los paisanos que no solo disfrutaron sus derrotas, sino que las celebraron y los humillaron. No se puede proponer un país distinto al feudo de Castro desde el cinismo, entregando el tesoro de la pelota. Hay que desear algo, siempre hay que desear algo. Yo creo que la politización del juego tal como la conocíamos acaba de terminar", expone por parte el periodista y escritor Carlos Manuel Álvarez, director de la revista El Estornudo.

"Si no entiendes cómo el régimen cubano utiliza el deporte para propaganda…entonces no entiendes nada. Ahora lo hace en las redes sociales… con el @WBCBaseball

… Mientras tanto @LMOAlcantara y @MaykelOsorbo349 continúan en prisión. Ellos y más de mil presos políticos", considera Norges Rodríguez, director del medio independiente Yucabyte.

Si no entiendes cómo el régimen cubano utiliza el deporte para propaganda…entonces no entiendes nada. Ahora lo hace en las redes sociales… con el @WBCBaseball… Mientras tanto @LMOAlcantara y @MaykelOsorbo349 continúan en prisión. Ellos y más de mil presos políticos. pic.twitter.com/1aS3I1bVTV

— Norges Rodríguez (@norges14) March 15, 2023

"A mi me importa más que mi familia y la fanaticada beisbolera cubana en general tenga unas horas de alegría con la pelota que toda la propaganda populista e ineficiente que está haciendo el Partido Comunista con unos peloteros que en su mayoría lo desprecia en el fondo de su alma", acotó la activista Saily González Velázquez.

Para el periodista Ernesto Morales "si usted apoya al 'Team Asere' hágalo. Si usted no apoya al 'Team Asere' no lo haga. Pero unos y otros sí deben parar de hacer algo: imponerles sus credos o puntos de vista a los demás. Nadie necesita catecismos. Nadie los ha pedido. Hay que parar de ir a cuanto chat de messenger, WhatsApp o Telegram, a cuanto muro de Facebook o Twitter existe, a cuanto chat en vivo de todo ciber-programa o directa, recordando que usted... bueno, que usted esto o lo otro, y que usted piensa esto y también esto otro".

"La constante fundamentación de sus decisiones o ideas suena a que necesita validarlas una y otra vez. Deje descansar los dedos. Confíe en lo que le digo: a nadie le importa. Y querer imponer a otros su perspectiva funciona aún menos. Su amor o su odio es suyo, su respaldo o su rechazo es suyo, ¿quién le dijo a usted que tenía derecho a querer colonizar a los demás? Celebre los batazos de Cuba con lágrimas en los ojos, o maldígalos con espuma en la boca, es su derecho, pero por Dios, no tiene por qué sentir que alguien le pide un perpetuo acto evangelizador al respecto", concluyó.

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