Cubanos dentro y fuera de la isla esperan con ansias el estreno de “Plantados”, del realizador Lilo Vilaplana. Seis décadas después del inicio del aniquilamiento sistemático de la oposición cubana, llega esta obra dedicada al oscuro pasaje de los presos políticos. Vilaplana convirtió en arte el martirio de los patriotas que sufrieron la furia del régimen totalitario.

Se le conoció como plantados a los presos políticos cubanos que durante los años 60 y 70 se negaron a definirse como presos comunes. Para ellos vestir la ropa de los ladrones era un insulto, pues las razones de sus largas penas era el deseo del retorno al camino constitucional y el restablecimiento de la democracia y la república. Así que prefirieron la desnudez para evitar la afrenta de ser tratados como rateros. 

Archivo Cuba, una organización dedicada a la conservación de la memoria histórica del pueblo cubano conserva pruebas de los presos políticos cubanos ultimados por el régimen de Fidel Castro. Tan solo los documentados patentan 3 116 fusilados, condenados en juicios sumarios y otros 1 166 ejecutados extraoficialmente. 

Lilo Vilaplana muestra la dimensión humana de los visionarios que se opusieron de manera temprana a la dictadura. EL adoctrinamiento oficialista los recoge como traidores a la patria e intenta quitarles todo atributo moral. Sin embargo, se debe recordar que muchos de los presos políticos cubanos fueron luchadores contra la dictadura de Batista.

La Revolución en su forma de Saturno devoró a todos los que fueron firmes en su lucha por un camino de progreso para la nación. Plantados es una digna obra que recuerda a las nuevas generaciones el sacrificio de hombres y mujeres que fueron silenciados en las mazmorras de la dictadura más longeva del hemisferio occidental.

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