El reciente episodio de la telenovela cubana Sábados de Gloria ha desatado una intensa controversia en las redes sociales tras la emisión de una escena que muchos consideran demasiado explícita para la televisión nacional. La escena, que sugiere un trío sexual entre los personajes, ha generado rechazo, especialmente dado el historial de censura de la programación, que en el pasado incluso eliminó un beso entre personas del mismo sexo.

En el episodio en cuestión, los personajes de Paloma (interpretada por Ary Fonseca) y Eduardo (George Abreu) deciden involucrar a Javier (Alberto Corona) en su relación íntima, lo que llevó a la creación de una escena considerada por muchos como "excesiva". Para algunos, que la telenovela, hasta ahora conservadora en ciertos aspectos, incluya este tipo de contenido ha sido un paso demasiado radical.

La reacción en redes sociales no se hizo esperar, con comentarios que criticaban la escena como inapropiada para la televisión nacional. Algunos usuarios expresaron su desaprobación de forma vehemente, como se refleja en mensajes como: “Qué asco de escena, no era necesario”, “Ya es demasiado, se sabe que existe, pero no hay necesidad de tanto” o “¿Hasta cuándo tanta corrupción?”. Muchos se sintieron incómodos con lo que percibieron como un intento de "normalizar" lo que consideran una situación fuera de lo común.

Ante las críticas, varios miembros del equipo de producción de Sábados de Gloria decidieron ofrecer sus puntos de vista. Ary Fonseca, protagonista de la escena polémica, defendió su personaje, explicando que Paloma es una mujer empoderada, feliz y sin complejos. “Las personas tienen el derecho de hacer con sus vidas lo que deseen. Cada quien es feliz con lo que quiere ser”, afirmó la actriz, destacando la importancia de su personaje en la trama.

La directora de la telenovela, Tamara Castellanos, también respondió a los comentarios en redes sociales, aclarando que la subtrama de la que forma parte la escena aún está en desarrollo. “Siempre supe que sería polémica, pero sugiero que, como cultura general, profundicen en el tema. No es lo mismo un trío de sexo puro, que una trieja donde la relación es consensuada entre tres personas”, explicó Castellanos, invitando al público a reflexionar sobre el contexto de la escena.

Por su parte, el actor Roque Moreno, quien forma parte del elenco, defendió la escena y cuestionó la hipocresía de quienes la critican. “La verdadera perversión está en quien se horrorizó al ver la escena y salió a despotricar en las redes contra la novela, los actores y la directora”, expresó Moreno. Añadió que la crítica debe centrarse en mejorar la educación de los niños y no usarlos como escudo para rechazar temas que son parte de la vida adulta.

En medio de la polémica, el actor subrayó que la escena en cuestión es mucho más sutil de lo que muchos afirman, y señaló que los elementos clave de la misma se limitan a un beso y algunas miradas cómplices. Con este enfoque, insistió en que la sociedad debe dejar de ser hipócrita y aprender a manejar estos temas con madurez, en lugar de generar controversia innecesaria.

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