La activista cubana Omara Ruiz Urquiola acusó este miércoles a la compañía American Airlines de actuar en complicidad con el régimen de La Habana, después de que le negaran a Anamely Ramos abordar un vuelo con destino a la isla, en el Aeropuerto Internacional de Miami.

Desde dicha instalación, Ruiz ofreció declaraciones a los medios de prensa, condenando el proceder de la entidad ante el caso de Ramos, integrante del Movimiento San Isidro que, momentos antes, sostuvo un intercambio con funcionarios de American.

“Creo que aquí lo que más hay que destacar es la complicidad de una empresa norteamericana, la aerolínea insigne de este país, American”, comentó Omara Ruiz Urquiola, quien cree que la empresa “está funcionando a partir de lo que dictadura cubana dispone”.

“Eso es algo que nosotros debemos poner en el centro y es lo mismo que pasa con Iberostar y todas las empresas establecidas en Cuba”, señaló. Ruiz recordó el compromiso de la administración de Joe Biden en EE.UU. con la observación de los derechos humanos en la isla.

También destacó que Anamely Ramos solo cuenta con su carnet de identidad y su pasaporte como documentos oficiales, ambos emitidos por las autoridades cubanas. “Vino a EE.UU. con una visa turística (…) Es la aerolínea norteamericana la que está impidiendo que una turista como cualquier otra aborde con su pasaje un avión para llegar a su país”, dijo.

“Esto sencillamente es insólito, burla todos los protocolos, los reglamentos, leyes y marcos que tienen relación con la convivencia en occidente. American Airlines se está prestando para ese tipo de violación y hay que ir contra ella”, expuso.

Asimismo, Ruiz descartó la posibilidad de una demanda contra la compañía, ya que algunos abogados le dijeron que era prácticamente imposible, no solo por la duración, sino por el costo del proceso. “A ellos hay que señalarlos públicamente, emplazarlos”, dijo.

Poco antes, Anamely Ramos dijo que se había reunido con el jefe de seguridad y directivos del aeropuerto de Miami, además de funcionarios de American.

Los representantes de la aerolínea le comunicaron que, en ningún caso, ella podría volar a Cuba, ya que existe un protocolo con la isla y todos los países del mundo, donde ellos deben acatar lo que dicen las autoridades locales en materia de migración.

“Es decir, si Cuba declara inadmisible a una persona, ellos tienen que cumplir ese acuerdo”, dijo. Los funcionarios declararon que no conocen los motivos por los cuales el gobierno cubano tomó la decisión. “Tampoco preguntaron, porque dicen que no es problema de la aerolínea”, aseguró Ramos.

“Las empresas no pueden ir por encima de las regulaciones de los gobiernos”, dijo Ramos sobre los argumentos de la compañía.

En una publicación reciente, la activista y curadora de arte defendió su derecho a regresar al país donde nació y está establecida legalmente. “Mi derecho a regresar a mi país es legítimo y justo. Es un derecho humano. Todo lo demás, leyes, reglamentos, protocolos, deberían ser respetados mientras no violen esos derechos”, expresó.

“Cuba está violando esos derechos en mi caso. Cuba está pasando su responsabilidad a otros y esos otros están aceptando esa situación. Cuba está generando un problema a través de mí, con Estados Unidos porque me lanza a una situación de ilegalidad que yo no provoqué”, agregó desde sus redes sociales.

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