Ivana Gómez de 32 años, fue detenida tras presuntamente atropellar mortalmente a Katherine Kipnis de 41 años, en un accidente ocurrido en la madrugada del viernes en la intersección de Southwest Seventh Street y Southwest 22nd Avenue, en el barrio de La Pequeña Habana.

Luego del impacto, Gómez no se detuvo para brindar ayuda, sino que intentó huir del lugar. Fue interceptada poco después por la policía, que notó signos visibles de intoxicación alcohólica. Según los oficiales, Gómez tenía los ojos llorosos y enrojecidos, y despedía un fuerte olor a alcohol. Se negó a realizarse la prueba de sobriedad y solicitó un abogado.

Durante la audiencia del sábado, el juez William Altfield encontró causa probable para los cargos de abandono de la escena de un accidente con resultado fatal y resistirse sin violencia a la autoridad. Aunque la fiscalía pidió una fianza de un millón de dólares, el juez fijó el monto en 251.500 dólares. En caso de pagarla, Gómez deberá cumplir arresto domiciliario total, entregar su pasaporte y abstenerse de consumir alcohol.

"Las imágenes del vehículo evidencian la violencia del impacto", explicó el fiscal. El BMW conducido por Gómez presentó daños significativos en el parabrisas, donde quedaron mechones del cabello de la víctima atrapados, y parte de este fue hallado en el cinturón de seguridad, una muestra del brutal golpe.

La familia de Kipnis, visiblemente conmocionada, participó en la audiencia. Rachel Kipnis, prima de la fallecida, expresó entre lágrimas su dolor: "Me repugna que alguien pueda atropellar a una persona y tratar de salirse con la suya. Katherine era una luz brillante en nuestras vidas."

El padre de la víctima, Daniel Kipnis, también manifestó su profundo dolor por la pérdida de su hija: "Ella me dijo que me quería, y esas fueron sus últimas palabras. Nunca imaginé que sería la última vez que la escucharía."

El cargo de homicidio vehicular aún está bajo consideración y dependerá de los resultados de las pruebas toxicológicas y de la investigación completa. Si se confirma que Gómez conducía bajo la influencia del alcohol al momento del incidente, podría enfrentarse a una sentencia de hasta 30 años de cárcel. Por el momento, permanece detenida en el Centro Correccional Turner Guilford Knight, mientras la fiscalía prepara posibles acusaciones adicionales.

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