El músico cubano Emilio Frías, director de la agrupación El Niño y La Verdad, volvió a sus raíces durante su viaje a La Habana y visitó a sus allegados religiosos.

El artista, que dijo ser miembro de la religión abakuá, señaló que no es albergue para hombres sin decoro.

“Desde muy joven mis domingos eran de ‘Juntas’, reuniones de la congregación Abakua, nacido en esta cultura mal vista por muchos y amada y respetada por otros, recorrí casi todos los plantes de Cuba, Los Pocitos, Pogoloti, La Lisa, Párraga, San Miguel, Regla, Guanabacoa Y Matanzas”, comentó.

“Llegar a Cuba e ir a La Habana Vieja a visitar a mis ecovios y de paso saludar a Musagara es una obligación y un deber que siempre cumpliré”, aseguró.

“Empego ‘Orden Y Respeto’ eso representa mi plaza en esta linda religión y eso seré hasta el final de mis días. Empego Mogobion Efi Musagara temio biara abomi Iren”, señaló.

Antes de finalizar, el artista dejó una aclaración. “Ser Abakua no es un título que se puede colgar en una pared, ser Abakua no es ser un delincuente ni un asesino despiadado, ser Abakua no es ser un presidiario ni un hombre sin cultura… Abakua hombres libres y de buenas costumbres, un ejemplo de hombría ante la sociedad”, concluyó.

Frías regresó en días recientes a la isla. “Volver a reunir a toda la familia o a la parte que queda en Cuba era uno de mis sueños en esta visita a Cuba y se hizo”, aseguró el artista.

“Bisabuelos, Abuelos, padres, hermanos, hijos, nietos, bisnietos, todo juntos en una misma mesa, todos en un mismo pensamiento”, apuntó.

“Es que la familia es lo más grande y que por encima de ella no hay nada. Gracias a todo lo que existe por permitirme vivir estas experiencias, que es el oxígeno que da vida a mi espíritu”, escribió.

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