Cuando se conoce de un próxima apertura de las fronteras cubanas al turismo masivo, esta semana también se conoció de las afectaciones que han sufrido por ya casi dos años, los trabajadores de ese sector en la mayor de las Antillas.

En Mesa Redonda de esta semana , Juan Carlos García Granda, ministro de Turismo de Cuba informó que decenas de miles de trabajadores cubanos quedaron interruptos o fueron reubicados tras el cierre de las operaciones turísticas.

En su criticada intervención García Granda habló de la estrategia para la apertura del país al Turismo a partir del 15 de noviembre y señaló que “había que tener fe” y llamó la atención sobre el beneficio que sería para los trabajadores de este sector, la reactivación de los hoteles.

“De los 111 033 trabajadores del sector, solo se encuentran laborando 55 832, el 50, 3%, además de 2 950 laborando a distancia o en la modalidad de teletrabajo. Se mantiene la actividad turística en tres destinos, tenemos trabajadores en centros que se han puesto al servicio del combate a la pandemia, en centros de aislamiento y en hoteles que se han convertido en hospitales pediátricos y para embarazadas en medio de este rebrote”, explicó.

El ministro del Turismo advirtió entonces que el resto de los trabajadores de ese ramo tuvieron que ser reubicados o están interruptos; mientras, en otro ámbito expuso que también fueron afectados empleados de otros sectores que laboran de conjunto para el Turismo, donde se incluyen trabajadores privados.

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