La Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras interceptó a hace un par de meses a más de 9º mil personas, de las que 53.077 eran familias. En total, en lo que va de año fiscal, desde el inicio de octubre, se ha frenado a 361.087 personas, de las que 135.605, es decir, cuatro de cada 10, viajaban en familia.

Según explica un reporte de Telemundo, el pasado mes “fueron más de 98.000, de los que 58.000 fueron familias, un nuevo récord. En su mayoría son emigrantes centroamericanos que dejan sus países junto a sus hijos huyendo de la pobreza y la inseguridad”.

“En la frontera, los menores no acompañados y las familias con hijos pequeños reciben un tratamiento diferente a los adultos, que se traduce por ejemplo en un tiempo muy reducido de encarcelamiento en centros de detención una vez pasado el primer trámite de asilo”, reseñó el citado medio.

Por su parte, el Departamento de Seguridad Nacional denunció que hay adultos que fingen viajar con sus familiares “alquilando en el mejor de los casos a menores que fingen ser sus hijos, aprovechándose de las necesidades económicas de sus padres, o secuestrándolos o mediante los traficantes de personas”.

“Desde abril de 2018 se han descubierto 3.100 casos de fraude entre las 260.000 personas que han sido interceptadas intentando entrar al país en familia”, aseguró Telemundo.

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