El estremecedor caso de Miriam Shvetz, una mujer de 34 años detenida en Miami Beach, genera indignación en Florida y reaviva el debate sobre la negligencia infantil. La policía la arrestó después de hallar a sus tres hijos en un entorno que los agentes describieron como “inhabitable”.

Dos de los menores, de 5 y 9 años, estaban solos en un apartamento lleno de basura, con fuerte olor a comida podrida y orina, baños obstruidos y platos infestados de insectos. El tercer hijo, de 7 años, se encontraba en la escuela al momento de la intervención.

El hallazgo se produjo tras una llamada del exesposo de Shvetz, quien fue alertado por los propios niños de que la madre no estaba en casa. Un agente constató la escena al llegar y escuchó a uno de los pequeños llorando durante una videollamada con su madre, quien admitió que había salido porque “tenía cosas que hacer”.

A la gravedad de la situación se sumó otro detalle: los dos hijos mayores no estaban matriculados en la escuela, algo que ella misma reconoció que no pensaba resolver.

"Lo más alarmante", señalaron las autoridades, "es que los menores vivían en un estado de abandono prolongado".

Shvetz fue llevada al Turner Guilford Knight Correctional Center y permanece bajo fianza de 5.000 dólares, mientras el padre de los niños asumió la custodia temporal.

Este no es un caso aislado en Florida. En 2024, en Hialeah, una madre fue arrestada por dejar a su hija de 3 años encerrada en un auto bajo el intenso calor, lo que casi le cuesta la vida.

En Fort Lauderdale, otro incidente reciente involucró a un padre que dejó a sus gemelos de 2 años solos en un apartamento rodeado de drogas y armas. Las autoridades aseguran que la negligencia infantil es un problema persistente en el sur del estado y que los servicios de protección al menor están desbordados.

“Los niños no solo requieren comida y techo, necesitan cuidado, atención y un ambiente seguro para crecer”, afirmó un portavoz policial tras el arresto. Organizaciones comunitarias en Miami han insistido en reforzar programas de prevención y educación parental para evitar tragedias similares.

Este caso impacta porque nos recuerda que la negligencia infantil no siempre se manifiesta con violencia física, sino con la ausencia de cuidado, supervisión y condiciones dignas.

La detención de Miriam Shvetz abre nuevamente la pregunta sobre cuántos menores en Florida enfrentan cada día un peligro silencioso tras las puertas de sus propias casas.

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