Ante la escasez de recursos en Cuba, los ciudadanos siguen acudiendo a las redes sociales para conseguir espejuelos.

“Mi nombre es Thaimet, soy madre de seis hijos y vi la publicación de que usted ha ayudado a personas. Yo tengo tres de mis hijos débiles visuales y requieren espejuelos y esa graduaciones no las hay y el que la tiene es muy caro y no tengo para eso y mi niña se está quedando sin visión de un ojito. Por favor, si usted me pudiera ayudar”, dijo este miércoles una cubana por Messenger.

“Yo vivo en Saratoga, la arenera, pasaje B #48 al final”, señaló desde Camagüey.

“Son ellos tres, menos la de la blusita de Minnie. La que tiene la blusa azul es miope y me está perdiendo la visión del ojito derecho y según el médico se me puede quedar cieguita de ese ojito. Los otros dos también son miopes y tienen estrabismo pero menos que la niña y el niño chiquito espasmo en los ojitos. La edad de ellos es la hembrita 8 y los dos varones uno 7 y el otro 4”.

Si pueden ayudar, por favor, comuníquese con Thaimet Fernández al número 55319833.

Tras la publicación de su caso en mi página de Facebook, Fernández comentó que recibió la ayuda de un cubano en Ecuador. "Me escribió un cubano que vive en Ecuador que es oftalmólogo y se brindó a ayudarme cuanto antes. Muchas gracias por ayudarme a mí y a mis hijos de todo corazón".

Varios cubanos lamentaron la situación en el país. "Qué tristeza, Dios mío ayudarla, somos un país potencia médica donde no hay de nada, que alguien ayude y no permita que estos niños se queden ciegos, verdad que están muy caros los espejuelos y son varios niños".

"No hay y el torno de los lentes en Obispo hace meses que está roto y ni para los niños hay lentes", dijo un cubano.

"Cuba está así por muchos que lo único que saben es ponerse contento porque van a Cuba, regalan tres pesos y ya... Pero nadie habla de las necesidades, nadie pide ayuda para tantos niños y ancianos que están sufriendo. No hay medicamento, no hay nada de nada pero para estas cosas Lenier (Mesa) ni ningún otro cantante habla, en fin", lamentó una cubana.