Una madre cubana trasciende en redes sociales por mostrar cómo idearon un yeso para su hijo desde la inventiva.

El propósito de la cubana fue enseñar a otras madres una alternativa económica y algo para las familias que no tienen cómo pagar un yeso en el mercado negro en Cuba, donde los insumos médicos cada vez escasean más.

Thalia Figueredo ha compartido lo que llama "una idea" para quienes estén pasando por una situación similar en la mayor de las Antillas y lo hizo a través del grupo "Mamitas holguineras" un espacio en Facebook con casi 50 mil miembros.

“Una idea para las mamás que tienen niños necesitando un yeso y no hay en el pediátrico porque está en falta, pues ahí les dejo la idea. Ya las madres hoy en día se someten a ser creativas sin ser ortopédicas espero nuestro niño mejore con un yeso solo hecho con amor y pocos recursos”, escribió la cubana mostrando cómo en casa lograron inmovilizar el pie al pequeño.

Su idea fue recibida con  diferentes opiniones. Para algunas madres es valioso todo lo que se pueda compartir y sirva para ayudar a los hijos; mientras algunos cubanos no se creen los niveles que ha alcanzado la miseria en la isla.

“Es triste la precariedad que viven las instituciones de este país y que alimenta este tipo de creatividad. No obstante, gracias por compartir su ingenio, seguro será útil para otras personas que tristemente compartan su situación”, dijo una cubana.

Una usuaria agradeció a la madre que compartió la idea: “a falta de recursos se busca lo que sea para curar a nuestros hijos y familia, me encantó la idea. Gracias”, dijo.

Una internauta contó que sufrió en carne propia la enorme escasez en los hospitales cubanos “yo tuve a mi bebé malito con una intolerancia a la leche y no había esparadrapo para amarrarle el suero. Se lo amarramos con bolsas de nailon, las mochitas las conseguimos porque era un bebé pequeño y a los niños más grandes le pasaban el suero con agujas, eso es un peligro, pero así estamos”.

Esta cubana se solidarizó con la madre que mostró la idea y pidió a los médicos de la isla que reclamen el seguir trabajando en esas condiciones paupérrimas.

“Muchas bendiciones a ese bebé y a su familia por tratar de ayudar. ¿Qué no hacemos por nuestros hijos? Pero qué conformistas somos, las fracturas son serias, aún con yeso a veces no soldan y hay que operar y en muchas ocasiones quedan mal, no podemos conformarnos a todo. ¿Hasta cuándo los médicos de este país van a cerrar los ojos? Son niños, reclamen por favor, no hay jeringuillas, no hay guantes, no hay mochitas, no hay yeso: pero si hay hoteles, si hay carros de turismo y si hay cuanta cosa se les ocurra vender en dólares”, lamentó.

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