A partir del próximo 1 de julio de 2025, entrará en vigor un nuevo requisito migratorio que cambiará significativamente la forma en que se viaja a Cuba.

Según informó el Ministerio de Turismo (MINTUR), todos los viajeros internacionales que no posean pasaporte cubano deberán gestionar una visa electrónica obligatoria antes de arribar al país.

El anuncio, realizado en medio de una severa crisis en el sector turístico, busca —según las autoridades— mejorar el control de entrada y salida de viajeros, así como fortalecer la eficiencia de los procesos migratorios.

El trámite se realiza exclusivamente a través del portal oficial evisacuba.cu y tiene un costo de 50 dólares.

La nueva medida afecta directamente a miles de cubanos residentes en Estados Unidos que viajan con pasaportes de otro país, incluidos hijos de cubanos nacidos en el extranjero, esposos/as de ciudadanos cubanos o familiares que usan documentación extranjera.

Solo quedan exentos quienes posean un pasaporte cubano vigente.

El visado electrónico permitirá una estadía en la isla de hasta 90 días, prorrogable por otros 90, y será enviado por correo electrónico en un plazo de hasta 72 horas hábiles.

Para abordar el vuelo, los viajeros deberán presentar este visado junto con el código QR generado al completar el formulario obligatorio D’Viajeros, disponible también en línea.

Aunque los visitantes provenientes de Canadá seguirán recibiendo la visa incluida en el precio del boleto aéreo en vuelos directos, quienes hagan escala o viajen con otras aerolíneas deberán gestionar el visado electrónico, sin excepción.

El Ministerio de Turismo y el Ministerio del Interior han advertido sobre la proliferación de páginas falsas que ofrecen este trámite cobrando tarifas excesivas o proporcionando documentación inválida. Se insta a todos los interesados a utilizar exclusivamente el sitio web oficial para evitar fraudes, demoras en el viaje o incluso la denegación de entrada al país.

Esta medida representa un cambio profundo en la política migratoria cubana, que históricamente permitió la entrada con tarjetas turísticas más flexibles. El visado electrónico busca estandarizar el proceso en un momento en que la isla enfrenta críticas internacionales por la caída del turismo y la mala experiencia reportada por visitantes recientes.

La implementación será seguida de cerca por agencias de viajes y autoridades migratorias en Estados Unidos y otros países con alta movilidad hacia Cuba.

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