Un administrador de la bodega "La Riviera" en Sancti Spíritus ha sido condenado a 10 años de prisión por malversar bienes por un valor superior a 200,000 pesos cubanos (aproximadamente 625 dólares al cambio actual). El Tribunal Provincial Popular de Sancti Spíritus dictó la sentencia tras un juicio que reveló que el acusado había desviado productos alimenticios e industriales durante un período de 10 meses, afectando directamente a los consumidores que dependían de la libreta.

El acusado, cuya identidad no ha sido revelada, administraba la bodega perteneciente al Ministerio de Comercio Interior. Durante el juicio, se probó que se apropió de arroz, azúcar, frijoles, sal y leche en polvo, además de productos de higiene personal. También se detectó el desvío de más de 6.000 litros de kerosina y diversas bebidas alcohólicas y no alcohólicas, entre ellas latas de cerveza, refrescos y cigarrillos.

Durante el proceso judicial, se reveló que el administrador había justificado la falta de productos ante los consumidores, alegando que la bodega no estaba recibiendo suministros por parte de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Sur de la Empresa Municipal de Comercio, lo que resultó ser falso.

Además de la sentencia de prisión, el acusado estaba obligado a reparar el daño económico causado. Deberá pagar una compensación de más de 200.000 CUP a la Empresa Municipal de Comercio, entidad afectada por el acusado.

El acusado tiene la posibilidad de apelar el veredicto ante el Tribunal Supremo Popular mediante un recurso de casación, que será el encargado de emitir el fallo definitivo sobre la firmeza de la sentencia.

Las autoridades de comercio han advertido que se aplicarán nuevas medidas de control y se reforzarán los sistemas de supervisión en las unidades comerciales para evitar que este tipo de situaciones se repitan. Asimismo, se subraya que se realizarán auditorías más frecuentes para garantizar que los productos lleguen a los consumidores.

La proliferación de casos de malversación y robo en la isla está estrechamente relacionada con la grave crisis económica que afecta a Cuba, agravada por décadas de políticas ineficaces. La escasez de productos básicos, los bajos salarios y la desesperación han generado un entorno en el que el robo y la corrupción se han vuelto estrategias de supervivencia para los cubanos.

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